HISTORIA DE BEATRIZ RAMOS

Nick Yarris, el hombre que pasó 22 años en el corredor de la muerte por un crimen que no cometió

Nick Yarris creció en un suburbio de Filadelfia, pero su infancia se esfumó cuando un adolescente le golpeó y le violó cuando tenía 7 años. El trauma le llevó a una depresión, a una adicción a las drogas y al alcohol, y a un primer arresto tras el que terminó en la cárcel. Desesperado por salir, inventó una historia para la policía: les dijo que sabía quién había cometido la violación y asesinato de una mujer, Linda Mae Craig, aunque en realidad sólo lo había leído en los periódicos.

Beatriz Ramos Puente

Madrid | 17.11.2016 06:49

La policía le acusó del homicidio y fue condenado a pena de muerte. La mayor parte de esas más de dos décadas de cárcel las pasó en aislamiento, sólo acompañado por las palizas que le daban los guardias y por 30 minutos al día de luz.

"Me sentí muy arrepentido y sólo rogaba a Dios que me diera una razón para vivir", cuenta Nick a la BBC. Uno de los vigilantes se apiadó de él y le dejó leer. En 1989, fue el primer reo en el corredor de la muerte en Estados Unidos en pedir un análisis de ADN tras la condena. Un juez ordenó una última ronda de pruebas y así descubrieron su inocencia. Nick quedó libre.

"Mi madre me dijo: estoy muy contenta, pero por favor, deja que por lo menos uno de mis hijos siga con vida". Dice también Nick que los siguientes años han sido más duros que el corredor de la muerte porque es muy difícil ser un buen hombre cuando has perdido tanto. Ve su paso por prisión como una vieja película que le ha dejado cicatrices para siempre, pero al mismo tiempo le ha salvado la vida. El asesino de la mujer nunca fue identificado.