El Doctor Gabriel Heras ha publicado el libro 'En primera línea: Un testimonio desde la UCI de la crisis del coronavirus'. En él recoge todas las vivencias de las peores semanas de la crisis del coronavirus. Fue un 27 de febrero cuando ingresó el primer paciente en la UCI del Hospital de Torrejón de Ardoz.
Nos cuenta en Julia en la onda que: "recuerdo aquel 27 de febrero con absoluta perplejidad porque se cambió el protocolo del Ministerio de Sanidad y a partir de la madrugada de ese día empezó el baile". Asegura que "no hubo respuestas en muchas ocasiones, la gestión guiada iba en el miedo y no en la ciencia". Y remarca que "la sanidad es demasiado importante para dejarla en manos de los políticos".En algunos momentos de las semanas más duras de la crisis, el Doctor Heras trabajó hasta 120 horas seguidas. Él mismo reconoce que "todos echamos una mano y estábamos compenetrados porque sabíamos que era la única manera de salvar las vidas de aquella gente". Aunque no niega que "ese era el peor lugar para trabajar".
Por último nos habla del proyecto HU-CI con el que se intenta trabajar en la humanización de estos servicios hospitalarios. Con este proyecto se quiere que los pacientes estén junto a sus familiares el mayor tiempo posible. Y es por ello que ahora el Doctor Heras tiene una cosa clara: "Si viene otra pandemia hay que evitar que la gente muera sola".