Carlos Herrera comenta las diferencias entre la primera toma de posesión del presidente Obama en 2009 y la de ayer. Resalta que ganó por un margen menor, cosa que no pasaba desde 1916, "se movilizó la ciudad menos que en 2009, de la misma manera que ganó con menos votos". Destaca que Barack Obama "es un gran orador, de un magnetismo innegable y vende una bondad solidaria que es el delirio de todo progre que se precie". Señala la importante mención a colectivos nunca citados en este tipo de actos, los inmigrantes y los homosexuales.
Sobre España comenta el anuncio del PP de autofiscalizarse, de hacer una auditoría interna y después una externa, pero plantea qué va a hacer el partido si "sale que alguien tuvo un comportamiento irregular", porque "la sensación, justa o injusta, apropiada o inapropiada, de que alguien se ha llevado el dinero a manos llenas está en la calle y todo en base a informaciones que no han aclarado nada, sobre unos pagos en negro en el PP pero sin saber ni quién ni como ni cuándo...".
