Andrés, por ejemplo, nos cuenta que el hecho de no tener papel higiénico un día, le sirvió para descubrir que es más cómodo el uso de bastoncillos a la hora de limpiarse.
Otro oyente nos comenta que un día se vio obligado a usar un trapo, en el que previamente habían echado "Pronto", con tal mala pata que acabó cayéndole en la cabeza a un obrero.