SE NOS VA LA OLLA

Las claves para hacer una buena sopa de cebolla son la calidad de la cebolla y el tiempo

El chef, Quique Rodríguez, nos propone cocinar sopa de cebolla. Las claves para hacer una buena sopa de cebolla son, por una parte, la calidad de la cebolla y por otra el tiempo. Además, hoy vamos a dar un par de claves a nuestros oyentes para hacer una muy rica sopa de cebolla con migas de bacalao.

Y para ello los ingredientes que necesitamos son.

4 cebollas, 1.5 l de caldo de gallina y verduras, 1 trozo de pan, 2 dientes de ajo, 1 punta de jamón vino de jerez, 50 gr. de queso rallado, aceite de oliva virgen extra, sal, perejil fresco y 100 gr. de migas de bacalao (opcional).

Nuestro primer paso será preparar previamente un caldo de verduras y gallina cociendo durante 1 hora y media los ingredientes en agua (zanahoria, puerro, cebolla, apio, y 1 cuarto de gallina). Cuanto más concentrado el caldo, mejor. Lo vamos a colar y dejar reposar para poder quitarle después la grasa que pudiera tener. Lo podemos hacer el día antes.

Por otra parte, nuestro trozo de pan vamos a cortarlo en dados, lo ponemos en una bandeja de horno o en la sartén con unos dientes de ajo pelados y machacados, y un chorrito de aceite de oliva y vamos a dorar ese pan, cuando lo tengamos tostado, lo retiramos del horno o sartén, y espolvoreamos con un poco de queso rallado.

Vamos ahora a cortar nuestras cebollas en finas tiras, lo que llamamos juliana, es importante tener abundante cebolla y vamos a rehogar en una cazuela con un poco de aceite de oliva y la punta de jamón y dejamos pochar a fuego lento durante 30/40 minutos hasta que coja un color oscuro. El aceite se puede sustituir por mantequilla, que es como originariamente se hacía en Francia.

Con la cebolla bien pochada, un truco, vamos a añadir un chorrito de jerez, dejamos reducir y añadimos el caldo y dejamos cocer otros 25 o 30 minutos a fuego medio.

Nuestra sopa habrá reducido, la cebolla estará muy blandita y estará bien de espesor para poner a punto de sal. Otro truco es, si queremos darle un toque diferente, en el último momento, le vamos a incorporar unas migas de bacalao desalado, dejando la sopa que de un hervor. Y ya la tendremos lista.

Ya sea con o sin bacalao, lo ideal es comer esta sopa en taza, echando unos dados de pan tostado con queso por encima, o incluso como marcan sus orígenes, espolvoreando más queso y gratinándola ligeramente en el horno. Por último, un poquito de perejil fresco picado.

Y ya tendremos lista nuestra sopa perfecta para este invierno frio, siendo un plato muy sano y económico.

Mónica Santos

Lugo | 15.01.2021 13:59