Su presidente Paulino Álvarez considera que abrirán sus puertas el 35 o 40% de los establecimientos que sean de autónomos o tengan poca carga de trabajadores. Ha reiterado que desde el sector cumplen con todos los protocolos higiénicos-sanitarios. Además, aplauden la medida de que el cliente únicamente se quite la mascarilla para comer o beber. Eso sí, indica que no hay que caer en el mismo error y si la situación vuelve a empeorar por una cuarta ola, no debería cerrarse la hostelería, ya que habría muchos negocios que no podrían aguantar y desaparecerían.
Por otro lado, confía en que una vez pasados los carnavales, pueda ampliarse el horario de apertura e igualarlo al toque de queda.