El incremento de los precios del combustible, la energía y los fertilizantes ponen más presión sobre el sector y obligan a necesariamente elevar los precios de venta en origen. Montaner no cree que las grandes distribuidoras que dominan los mercados tengan en cuenta estas circunstancias y si se mantienen los precios de la anterior campaña de cítricos sería la ruina de los agricultores.
Montaner cree que hay que desmitificar el modelo Neoliberal pues sin agricultura no comemos y agricultores y ganaderos están al borde de abandonar sus tierras y producciones. Haya que redefinir la política agraria común europea.