"Estoy convencido de que las mujeres son muy responsables y van a actuar en consecuencia", ha recalcado en una entrevista en 'Espejo público' recogida por Europa Press, sobre la diferencia de criterio de las delegaciones de Gobierno por permitirlas en la Comunitat y no en Madrid.
Puig ha insistido en que hay que poner el foco en la vigencia del feminismo y "la necesidad de la reivindicación" a pesar del virus, ya que "el año pasado se evidenció más la desigualdad". Ha rechazado así que "el 8M esté vinculado a si hay o no manifestaciones en Madrid", aunque su Delegación de Gobierno "tendrá sus razones" para no permitirlas.
En clave valenciana, ha recordado que la Delegación de Gobierno de la Comunitat ha autorizado durante estos meses "muchas manifestaciones", algunas contra las restricciones que "tienen toda la lógica" y con las que empatiza.
Por tanto, Puig ha descartado "pensar que las concentraciones son diferentes si atienden a un objetivo o a otro" y "estigmatizar la reivindicación justa de las mujeres". "Se han autorizado otras manifestaciones con seguridad sanitaria y distancia física", ha defendido.
Y ha afirmado, preguntado por si es que las valencianas son más resistentes, que desconoce las consideraciones que habrá hecho la Delegación de Gobierno para autorizarlas, aunque cree que "habrá sido desde la mejor voluntad". "En Madrid se toman decisiones diferentes en muchos aspectos", ha apostillado.
En dirección prohibida
El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, ha insistido en que todas las autonomías deberían estar cerradas en las vacaciones de Semana Santa para "generar una atmósfera favorable a la contención", por lo que ve "difícil de entender" que la Comunidad de Madrid se plantee no hacerlo. "Es como cuando uno va en dirección prohibida en la autopista", ha afeado al gobierno de Ayuso.
A dos días del Consejo Interterritorial de Sanidad, Puig ha llamado a que haya un amplio consenso en España en las restricciones de Pascua, con el objetivo de no dar mensajes contradictorios a la ciudadanía porque "es la única manera". También ha recordado que "por supuesto" el cierre perimetral es de obligado cumplimiento.
"El cansancio 'pandémico' existe, todos tenemos ganas de que pase ya, pero ahora estamos por primera vez en posición de ataque. Estamos ganando este partido", ha defendido en una entrevista en 'Espejo público recogida por Europa Press.
Puig ha destacado que la incidencia acumulada en la Comunitat ya está por debajo de 80 casos por cada 100.000 habitantes, una caída que ha achacado a la responsabilidad de los valencianos y al avance de la vacunación. Abril es el mes que ha vuelto a apuntar como escenario para la vacunación masiva para "llegar al verano en las mejores condiciones".
Hasta entonces, ha confiado en que se agilice la recepción de vacunas y ha defendido que la de AstraZeneca se pueda pinchar a mayores de 55 años como reclama Catalunya, pero siempre en base a criterios científicos como ya se ha autorizado en Alemania. "No vamos a adoptar ninguna medida que pueda poner en riesgo a nadie", ha remarcado.
En materia económica, Puig se ha comprometido a estudiar durante esta semana todos los informes de Salud Pública para adoptar en consecuencia "las medidas correspondientes de flexibilización", ante la petición de la hostelería de abrir en interiores y cerrar más tarde.
Pero ha advertido que hay que desescalar con seguridad porque "no podemos dar pasos atrás", además de recordar que en los espacios cerrados hay más contagios. En todo caso, ha vuelto a empatizar con "el dolor y tristeza de centenares de miles de personas vinculadas al sector" y ha resaltado el plan 'Resistir' con más de 400 millones de ayudas, a la espera del fondo nacional de 11.000 millones.
De cara a la reanudación del turismo, ha confiado que a partir de mayo puedan empezar a llegar viajeros y se empiece a abrir la movilidad en Europa con el certificado de vacunación, recordando que en 2019 llegaron 30 millones de turistas a la Comunitat y el año pasado esta cifra cayó un 73%. "Incluso abriendo perdemos", ha constatado.
