Los regantes del Júcar-Vinalopó confían en que un Gobierno central estable marque un precio viable del agua del Azud de la Marquesa

Los regantes del trasvase Júcar-Vinalopó en la provincia esperan como agua de mayo la constitución de un Gobierno central definitivo, que no está en funciones, para abordar con el mismo de manera urgente la firma de un convenio que contemple un precio asequible y viable al agua procedente del Azud de la Marquesa.

En Elche son en torno a 1600 los agricultores que se nutren del agua procedente del Júcar, adscritos a la SAT San Enrique y a la entidad de San Pascual. Además, desde el Júcar llega agua al Ayuntamiento de Elche para abastecimiento.

Este año no han recibido ni gota de agua para regar procedente de la cuenca del Júcar dado que se han negado a ello por el alto precio el metro cúbico de agua fijado por el Ministerio de Agricultura, que en primer lugar se situó en 0,35 céntimos de euro el metro cúbico y posteriormente se bajó a 0,30 euros.

Sin embargo, según ha explicado Ángel Urbina, portavoz de la Junta Central de Usuarios del Trasvase Júcar-Vinalopó, en ambos casos, los regantes insisten en que es inviable comprar esa agua y reclaman que se dejen de cargar en esa tarifa los costes de amortización de las infraestructuras del trasvase. Éste es además una circunstancia que Les Corts han aprobado recientemente por unanimidad requerir al Gobierno de España, si bien para ello es necesario que tome posesión uno definitivo.

Respecto al trasvase Tajo-Segura, Ángel Urbina, que también es portavoz de la Comisión Técnica de la Mesa del Agua de la Diputación de Alicante, ha denunciado que el gobierno central tiene la intención de establecer un precio “insoportable” al agua del mismo.