El ejercicio debe ser una costumbre que tú dosificas según las señales que te va dando tu cuerpo. Cuerpo que se habitúa y no avanza si la costumbre se convierte en rutina porque éste sea siempre el mismo. Así que, varia, cambia de actividad y no olvides hacer pesas para mantener alejada la flacidez y tu metabolismo en buena forma para que consuma la mayor cantidad de calorías y no engordes.
En esto del ejercicio hay personas totalmente intolerantes rozando la alergia y las hay que no lo hacen porque les duele. En el primer caso no vale decir “a mí no me gusta el gimnasio y por eso no me muevo" porque ejercicios hay tantos como personas solo que hay que buscar cual es el que mejor encaja con uno, pero nunca te quedes parad@ haz que tu cuerpo se ejercite antes de que se atrofie. En el segundo caso. Los hay con razón y sin. Hay gente que padece artrosis y artritis y les duele, y los hay a los que realmente lo que les duele es la pereza. Cuando existe es una inflamación de las articulaciones y los tejidos que las rodean como los músculos y tendones, aunque no lo creas, el ejercicio es beneficioso para casi todas las personas. Durante muchos años se pensó que las personas con artritis o artrosis no debían hacer ejercicio porque lesionarían sus articulaciones y nada más lejos de la realidad porque se ha demostrado que fortalece los músculos que las rodean y retrasan el deterioro óseo.
Una vez tomada la decisión de empezar a hacer ejercicio, hay que vestirse y alimentarse adecuadamente, hay que hidratarse y hay que consultar qué hacer, cómo hacerlo y cuándo hacerlo. Es decir, cual es la actividad más beneficiosa para tu condición física y sexo. Cuidado con algunos ejercicios como el running que en muchas mujeres está afectando a su suelo pélvico provocando entre otros problemas pérdidas de orina. Los ejercicios más lesivos son, como te puedes imaginar, los que más impacto provocan en las articulaciones. Todos los ejercicios que supongan un impacto siempre serán más lesivos que los que no. Pero como insiste Lidón Soriano, doctora en Ciencias de la actividad Física y el Deporte, el impacto es necesario, no lo eliminemos por completo.
Hay que tener cuidado con las cintas de correr porque tienen oscilaciones y eso puede producir microroturas sobre todo en los gemelos. Hay que ser prudente con la bicicleta, sobre todo las mujeres tras haber parido o las personas con una barriga flácida porque puede ser nefasta. Y tenemos que ser honestos cuando hacemos pesas y no pretender ir mas allá de nuestras posibilidades porque eso lo que acarrea son malas posturas que conducen a lesiones o acortamientos que van a generar contracturas.
Futbol, esquí de fondo, natación a nivel alto, tenis, pádel, running, atletismo, balonmano… hay que tener mucho cuidado porque es fácil lesionarse. El ejercicio, depende de quien lo hace, cuando lo hace y como lo hace. No vale el mismo para todos. Y luego tienes prendas de ropa que mejoran el rendimiento y disminuyen las lesiones. Esto que parece ciencia ficción lo han conseguido unos doctores españoles patentando la tecnología que esconde entre sus fibras unas prendas que acaban de llegar a algunas farmacias metidas en botes bajo el nombre de Ekatom. Las fibras de estas prendas de ropa son capaces de emitir y captar infrarrojos como las lámparas que se utilizan en fisioterapia estimulando la circulación y con ello aliviando dolores musculares, disminuyendo la fatiga y las lesiones. Son termorreguladoras y repelen el mal olor. Como prendas interiores o para dormir son maravillosas, no muy sugerentes, pero comodísimas porque no sudas a pesar del edredón. Y para hacer deporte muy recomendables porque no provocan ni ampollas ni rozaduras. Han sido probadas por atletas, corredores, futbolistas del Real Madrid y a nivel termorregulador por una expedición en el Himalaya y en un invernadero de Almería y tienen muchos estudios que avalan su eficacia.
No quiero acabar sin volver a recordarte los beneficios de hacer ejercicio: activa el sistema inmunitario, mejora el funcionamiento mental, aumenta la energía, fortalece los músculos y los huesos, y reduce el riesgo de sufrir enfermedades crónicas como las cardiacas, el cáncer y la diabetes, entre otros. Y que "Si no nos movemos, no seremos capaces de movernos". Nadie se arrepiente de hacer ejercicio, solo tienes que comenzar.
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Mil besos
