El arqueólogo David Gallego, junto a su equipo y estudiantes universitarios, trabajarán en dos turnos durante julio y agosto, para excavar la fase de conexión entre el castillo cristiano y los restos previos musulmanes. Mientras que, al mismo tiempo, los alumnos aprenden técnicas de conservación y restauración.
El curso pretende poner en valor el Castillo de la Estrella, que data del siglo IX y del que aún queda gran parte por investigar.