Los creadores del proyecto Ressonadors, Omar Gisbert y Joan Barbé han estado en el programa Más de Uno para analizar del pasado, presente y futuro de esta iniciativa que nació hace 15 años y que ha sido galardonada con el Premio Onda Cero Ibiza y Formentera 2024 en la categoría de Artes.
Un tiempo en el que tras numerosos conciertos, dos discos de estudio, la participación de más de 30 cantantes, numerosos músicos y personal de logística y apoyo se ha convertido en un referente para pitiusos de todas las edades y generaciones. Algo impensable cuando la idea empezó a gestarse una década antes de su presentación gracias a una idea que tuvo el propio Gisbert y a la que rápidamente se sumó Barbé.
En este sentido, el polifacético músico de Santa Gertrudis ha explicado con sentido del humor “que una de las partes más complicadas durante todo este tiempo ha sido el tener que pagar a los músicos porque muchos de ellos se han sumado y participado sin ninguna contraprestación y solo por el hecho de disfrutar sobre el escenario” y en esta misma línea Gisbert ha asegurado “que buena parte del éxito de Ressonadors ha sido el casting que se hizo para llamar a los cantantes y escoger la canción para cada uno de ellos”.
No en vano, según sus creadores, uno de los principales alicientes del proyecto “es poder ver en un concierto a artistas tan diversos cantando canciones que forman parte de la tradición pitiusa”. Y es que ninguno de los dos ha querido olvidarse del “magnífico trabajo” que hizo el grupo UC antes que Ressonadors “por ir recogiendo cuando no todo era tan sencillo todas esas canciones que corrían riesgo de perderse para luego transformarlas en el estilo que a ellos les gustaba”.
Además han explicado que aunque han tenido ofertas para exportar la idea a otros territorios de España como Castilla y León o Catalunya, nunca han aceptado “porque una de las claves de Ressonadors es que esta hecho por ibicencos que sentimos al máximo cada una de las canciones que se interpretan y pensando en la gente de Ibiza”.
Y tal vez por ello, han conseguido que haya temas que ya forman parte del imaginario popular de muchas generaciones como Jo tenc una enamorada, Anàrem a Sant Miquel, Sa nostra ciutat d’Eivissa, Flors de baladre, Trec-Trec-Trec o la inolvidable Bona nit, blanca roseta que hizo inmortal el gran Tito Zornoza, tristemente fallecido hace unos meses.
