Luengo destacó la importancia del planteamiento del partido, resaltando la solidez y la actitud del equipo: "Lo mejor fue cómo encaramos el partido, la solidez que tuvimos, yendo a por ellos desde el principio. Esa es la línea a seguir".
El defensa también señaló la dificultad que supuso enfrentarse a un rival que optó por encerrarse atrás: "Cuando un equipo se encierra es lo más complicado, intentaban cogernos en alguna contra, pero casi no crearon peligro. En los últimos minutos encontramos el gol, y eso nos dio la victoria".
Oier mostró confianza en el proceso de adaptación del equipo: "Hay que tener un poco de paciencia porque hay mucha gente nueva, el entrenador también es nuevo y los automatismos se irán cogiendo poco a poco. Hay que sacar buenos resultados y el juego llegará".
Asimismo, dejó claro el reto que supone la Segunda División: "Todos sabemos que la Segunda División es una locura. No hay ni vencedores ni perdedores hasta la última jornada y nosotros debemos seguir en esta línea de intentar ganar el mayor número posible de partidos".
El broche final lo puso al referirse a su experiencia personal durante las fiestas de San Mateo, donde subió al escenario para cantar el himno "Volveremos" junto a Melendi: "He sido fan de Melendi desde pequeño, así que poder subir al escenario y cantar el 'Volveremos' delante de todo el mundo fue espectacular".
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