Miembros de la DPZ y el Gobierno aragonés se reúnen en Ateca con los alcaldes afectados por el incendio que calcinó 14.000 hectáreas. De momento, sigue controlado, aunque no extinguido, y piden a los ciudadanos extremar las precauciones. La Diputación y los consistorios han pactado una declaración institucional para solicitar al Gobierno de España la declaración de zona catastrófica.
La vicepresidenta de la DPZ, Teresa Lardero, ha explicado que lo importante es actuar de forma coordinada para logar que las ayudas lleguen cuanto antes. Asegura que se complementarán con aportaciones del Gobierno aragonés y de la Diputación. Ahora toca cuantificar los daños. Para ello se ha puesto en marcha una oficina central en Ateca y una segunda oficina de atención en Moros, el municipio más afectado por las llamas.