Jaime Anchústegui lleva casi tres décadas trabajando en un sector “puntero en Europa” pero que tiene que asumir nuevos retos para el futuro más inminente. Uno, la gestión de los datos de los clientes y otro, la digitalización. A través de las nuevas tecnologías, las compañías de seguros pueden sacar conclusiones para beneficiar al cliente pero también a la compañía. Anchústegui muestra su pasión por un sector que ha evolucionado mucho en los últimos 20 años y que aún lo hará más cuando el año que viene entre en vigor una nueva regulación, la IFRS17.
Anchústegui es el ejemplo de cómo un ingeniero agrónomo se alejó de las ovejas y de la elaboración del queso para aterrizar, por casualidad, en el sector de los seguros. Han pasado casi 30 años de ese momento y su trayectoria y conocimiento demuestran que puede hablar con propiedad de un sector que ha cambiado mucho. “Hace 20 años, la práctica de las compañías de seguro era bastante diferente. Se igualó con la regulación que prácticamente todos los países del mundo siguen pero el año que viene aún cambiará más.
IRFS17 va a cambiar la forma en la cual analizamos las compañías de seguro y estamos trabajando e invirtiendo muchos recursos para cumplir con esta nueva normativa”. Para Anchústegui, esta implementación de la nueva regulación será un salto cualitativo y cuantitativo en la forma de ver el sector de seguros y analizar la sanidad y la efectividad de las compañías de seguros”. Con este panorama, el sector está homogeneizado aunque si hablamos de India, Francia, Italia o de España, las diferencias son evidentes.
En el caso de España, “el sector asegurador es un sector fantástico, somos uno de los países que mejor maneja las compañías de seguros. No desmerecemos con prácticamente ningún sector, en ningún otro país. Somos uno de los sectores punteros en Europa y lo digo desde la perspectiva de haber trabajado en bastantes países y de haber hecho muchas cosas en otros continentes. Nuestros canales de comercialización son muy buenos, muy efectivos, se trabajan muy bien y nuestras compañías de seguros son extraordinariamente buenas tanto las locales como las internacionales. Anchústegui lo tiene muy claro, “somos un sector muy bueno”.
Durante este quinto Encuentro Directivo de OBS Business School, Jaime Anchústegui conversa con Casilda Güell también de los retos del futuro que pasan por la gestión de los datos de los clientes. “La movilización de los datos de cliente, desde los centros operativos de liquidación de siniestros y desde los mediadores que gestionan directamente las relaciones con los clientes hacia las bases de datos de las compañías de seguros. La capacidad de análisis de esos datos y la capacidad de creación de oportunidades de venta efectivas para los clientes que consideramos interesantes para nosotros, ese es uno de los grandes retos. Y el mundo ha cambiado absolutamente en los últimos 30 años”.
Anchústegui tiene claro que la digitalización tiene que aterrizar también en el sector de los seguros porque aportará mucha información a las compañías sobre sus clientes “y esa capacidad de usufructo y de poder sacar conclusiones de los datos del cliente en beneficio del cliente, en beneficio del asegurado y en beneficio de los canales comerciales y de la compañía. Ese es uno de los puntos claves que tenemos en este momento en el sector del seguro. Es un reto tecnológico, de innovación, de convencimiento del beneficio de todos utilizando los datos del cliente”.
Para que sea una realidad, Jaime Anchústegui, CEO Internacional de la compañía de seguros Generali, sabe que parte del éxito pasa por el talento y la formación y “estamos reclutando a las personas más brillantes de absolutamente todas las facultades. Estamos buscando a la mejor gente porque si queremos tecnificar y llevar este proceso de innovación tecnológica a la realidad de la vida, necesitamos la mejor gente”. Con el mejor talento se pueden abordar los retos y también las tendencias que, en este caso, tiene como protagonista a la sostenibilidad. “Esto nos preocupa inmensamente a todos”, dice Anchústegui. “La sostenibilidad en este momento es uno de los principales pilares que tenemos en el grupo Generali y marca la agenda del grupo”.
Unas tendencias que conviven con la actualidad de nuestro mundo y que ahora viene marcada por la guerra en Ucrania. Para Anchústegui, este conflicto es impensable que esté ocurriendo en este siglo y alerta de las consecuencias que, augura, serán peores que las de la pandemia “porque nos tendremos que enfrentar a una inflación de dos dígitos”. Por eso, la gestión del impacto económico de este conflicto será uno de los grandes retos profesionales. Una guerra que llega tras más de dos años de pandemia pero Jaime Anchústegui reconoce que estuvieron muy bien preparados, que pudieron dar servicio a todos sus asegurados y que se tomaron las decisiones justas. Eso sí, “humanamente el impacto fue tremendo”.
El sector de los seguros, para Anchústegui, también tendrá que apostar por la inclusión, la diversidad y la internacionalización y, a nivel más personal, es uno de sus retos particulares como CEO Internacional de Generali.