El partido tuvo su primera noticia antes de que diera comienzo, cuando Ronaldo abandonó el calentamiento antes que sus compañeros y se le vio hablando con el médico del equipo, aunque finalmente no parecía tener nada serio. Una vez comenzado el partido, el Dortmund tomó la iniciativa con el control del juego y con una fuerte presión en la salida del equipo blanco y en el medio del campo. El derroche físico del Borussia era enorme y a los seis minutos Diego López salvó un tiro cruzado de Reus, tras una galopada del jugador que robó la pelota en el centro del campo a Khedira. Un minuto después, Lewandowski, tras un centro de Götze por la izquierda, remató a placer tras ganarle la espalda a Pepe en el segundo palo, para anotar el primer gol del Borussia. La noche empezaba mal para el equipo de Mourinho.
Con el resultado adverso el Real Madrid empezó a despertar, pero la presión de los alemanes y la disposición de los de Klopp en el campo, siempre muy juntitos, incomodaban la fluidez de juego. Xabi Alonso y Ronaldo tenían dos hombres encima cada vez que la pelota les pasaba cerca. El primer disparo del Real Madrid llegó a los veintitrés minutos con una falta desde treinta metros de Ronaldo que rechazó Weidenfeller.
Las sensaciones que se trasmitían no eran buenas. El Real Madrid pudo poner pausa al partido y tuvo algún acercamiento sin demasiado peligro. El Dortmund tampoco gozaba de oportunidades claras de gol, pero cada vez que acechaban las inmediaciones del área blanca generaban mucho peligro.
En el minuto cuarenta y uno Reus cayó en el área trastabillado por Varane. El árbitro no pitó nada y la pelota salió por la banda derecha. En el saque de banda, cuando todavía se pedía el penalti, la pelota salió rechazada hacia la defensa del Dortmund. Hummels intentó ceder el globo al portero pero falló en el pase e Higuaín, siempre atento a este tipo de errores, se llevó la pelota, se plantó sólo delante de Weidenfeller y cedió a Ronaldo para hacer el empate a puerta vacía. El Dortmund fue mejor en los primeros minutos, siempre dando sensación de peligro, pero la pegada del Madrid volvió a aparecer cuando más lo necesitaba.
Pero la segunda parte de nuevo arrancó mal para los de Mourinho y todo se torció. Un mal disparo de Reus tras un mal despeje de Khedira, dejó solo delante de Diego López a Lewandowski, que sólo tuvo que pegarla al palo derecho para anotar el segundo de los alemanes. Y dos minutos después, de nuevo Lewandowski, tras un rechace y revolverse en el área, puso el balón en la escuadra y el tercero para el Dortmund, que dejaba la eliminatoria muy cuesta arriba para el Real Madrid.
El Madrid intentó reaccionar y en el cincuenta y siete, Modric probó desde fuera del área, pero la pelota la atajó el portero sin mayores dificultades. En el sesenta y tres, Sergio Ramos remató una falta de Xabi Alosno que volvió a parar el portero, aunque la jugada estaba invalidada por fuera de juego. El Borussia esperó para matar la eliminatoria a la contra.
Y así fue: A los sesenta y seis minutos, Xabi Alonso derribó a Reus y el árbitro señaló penalti. Lewandowski anotó su cuarto gol, que le hacía entrar en la historia de fútbol y dejaba la eliminatoria prácticamente resuelta para el Borussia. En el minuto setenta y siete Diego López tuvo que volar para evitar el quinto de Lewandowski. El Real Madrid se fue para arriba buscando un gol que le dejase opciones para la vuelta. En el ochenta y ocho, Ronaldo consiguió disparar dentro del área pero de nuevo Weidenfeller detuvo el lanzamiento. En el último minuto, un trallazo de Varane en un córner se fue lamiendo la escuadra.
El Borussia Dortmund dominó el partido y pasó por encima del Real Madrid, que sólo pudo ver puerta tras un error de los alemanes. El conjunto de Klopp dominó todos las aspectos del juego y gracias a un enorme Lewandowski, autor de los cuatro goles, deja la eliminatoria encarrilada para el Borussia. El Madrid necesita un milagro para remontar la eliminatoria.