El Espanyol confirmó su buen momento con una victoria por 2-1 contra el Sporting, que sigue en zona de descenso, antes de visitar al Barcelona en el Camp Nou. El Espanyol apostó por el ataque, con Hernán, Baptistao, Moreno y Caicedo arriba, aunque Hernán Pérez se lesionó en el minuto 19 y tuvo que abandonar el terreno de juego tras sufrir un golpe en el pecho.
Quique Sánchez Flores, entrenador del conjunto catalán, no modificó su dibujo y sacó a Álvaro Vázquez, pero su equipo no pudo dominar claramente el inicio del choque. Un disparo de Gerard Moreno en el minuto 23, pegado a un poste, fue la mejor ocasión blanquiazul, y prácticamente la única, en el primer tramo del duelo. Aún así, el balón era del Espanyol.
El Sporting, cómodo con su estilo conservador, esperaba a los locales y buscaba la opción de gol a la contra. El portero Diego López apareció en contadas ocasiones y la poblada defensa del conjunto asturiano y la falta de precisión local fabricaron un choque gris en la primera mitad. La salida del Espanyol en la segunda parte fue prometedora: ocasión clara para Baptistao y un remate de David López tras un córner. Las sensaciones en el equipo catalán mejoraron y Caicedo las confirmó con el 1-0 en el minuto 54. El ecuatoriano remató de cabeza aprovechando un fallo en la salida de Cuéllar.
El partido se puso muy cuesta arriba para los de Abelardo, obligados a abrir espacios. El Sporting se enfrentaba a la versión más afinada del anfitrión, más suelto y con más confianza. El técnico visitante movió el banquillo con la esperanza de alterar el guión y entraron a la vez, en el minuto 66, Burgui y Viguera, pero el conjunto asturiano tenía dificultades para construir juego y acercarse a Diego López.
Además, Quique Sánchez Flores movió su pizarra y sentó a Álvaro para dar entrada a Diop, medio centro de perfil más defensivo. Agotó sus cambios minutos después con Marc Roca y sentando a Caicedo. Aún así, el Espanyol seguía apretando al rival. Aprovechaba las contras mejor que los de Abelardo, con urgencias y sin ideas.
Leo Baptistao culminó la fiesta en Cornellá-El Prat. Con una gran acción individual desde la banda derecha, el brasileño recortó a su defensor con una gran frialdad y firmó el 2-0 con un tiro cruzado. La victoria local parecía sellada, pero el Sporting no quería irse de Cornellá sin dar un aviso. Lo hizo Cop, en el minuto 91, con un gran gol de falta directa.