Todos los veranos sufrimos olas de calor, pero la sensación es que cada vez son más, más sofocantes y más duraderas. Y es que, como advierte la meteoróloga Isabel Zubiaurre, los fenómenos meteorológicos son cada vez más extremos y frecuentes. Este año ya hemos vivido fenómenos récord de los últimos cien años, varios de los días más fríos con Filomena, el día más lluvioso en Madrid el pasado 16 de junio y ahora podemos vivir uno de los días más cálidos si no de los últimos cien años, sí de los últimos treinta.
La epidemióloga Ana María Vicedo también advierte que la primera ola de calor es la más mortal del año, porque luego hay un proceso de adaptación en el cuerpo humano. A pesar de que actualmente la mortalidad por calor ronda el 0,4% al año, son eventos muy cortos con riesgos muy altos. Los más vulnerables son las personas mayores, aunque toda la población está en riesgo.
A día de hoy las muertes por frío siguen superando las muertes por calor, debido al aumento de las temperaturas, pero las tendencias indican que pronto será al revés, es decir, las muertes por calor superarán las muertes por frío, advierte la epidemióloga. Además, habrá un "incremento neto", es decir, aumentará el número total de muertes. A día de hoy, 1 de cada 3 muertes por calor se puede atribuir al cambio climático.
Zubiaurre ha anotado que los meteorólogos están teniendo que incorporar colores nuevos a los mapas para poder representar estas temperaturas extremas y advierte que este fin de semana posiblemente se llegue a los 48º. Sin embargo, nos tranquiliza diciendo que una calima procedente del Sáhara puede ayudar a calmar la ola de calor y bajar las temperaturas. ¿Quieres saber más? Escucha el audio completo.
