Recursos de amparo, decretos leyes, indultos, ex presidentes de gobierno, Jefatura del Estado, sucesiones, licitaciones, subvenciones, concesiones o asesores.
Todo pasa por el Boletín Oficial del Estado. El famoso BOE sale cada mañana, a las siete y media, de lunes a sábado. Todo el año y pase lo que pase. Para sus trabajadores, no hay festivos más allá del domingo.
Rigidez y puntualidad británica marcan el BOE. Pero con la pandemia todo saltó por los aires. Durante el primer Estado de Alarma se publicaron 85 BOES ordinarios y 22 extraordinarios. 9 de ellos, en domingo y 13, en horarios raros. Con el coronavirus, el BOE se ha convertido en un documento imprescindible. Porque todo lo que se publica nos afecta. Pero, ¿quién entiende el lenguaje del BOE? ¿Alguien sabe por qué quienes nos gobiernan tienen la manía de mezclar conceptos en un mismo texto legal?