Hoy hablamos de la situación en Afganistán. En pocos días, los afganos y las afganas, estarán abandonados a su suerte. El avispero seguirá revuelto como siempre desde hace décadas y ese quiste se irá consolidando todavía más.
Parece que, desgraciadamente, están condenados a vivir separados de la paz y de la estabilidad: Muertos, sufrimiento, discriminación a las mujeres, adoctrinamiento y destrucción, son solo algunas de las cosas que acontecen el futuro de un país gobernado por los talibanes.
La última muestra de esta barbarie son las dos explosiones cerca del aeropuerto de Kabul, la última esperanza para quienes esperaban huir del horror extremista.
Ahora mismo, en la capital afgana, todavía predomina la confusión mientras siguen creciendo las cifras de muertos y heridos. "Seguramente, no será el último ataque", ha vaticinado Carles Lamelo, quien ha asegurado que "lo que está ocurriendo tendrá consecuencias en el resto del mundo".
De momento, la factura ha sido bastante elevada en dólares, en víctimas civiles, en reporteros asesinados y en soldados muertos en combate.
¿Seguirá la prensa destacada allí para contarlo?¿Mantendrán los medios de comunicación el foco en el lugar? ¿O la cobertura se irá desvaneciendo mientras llegan otras historias que ocupen las portadas? Si esto ocurre, los talibanes tendrán aún más manga ancha para actuar a su antojo.
Hoy en "Pares y Nones", les contamos cómo se vive una guerra desde la redacción de un medio de comunicación y lo hacemos con María Jesús Ruiz, adjunta a la sección de Internacional de Antena 3 Noticias, quien ha puesto en valor el papel del periodista, fundamental en crisis como estas: "Las noticias no se van de vacaciones. Nosotros cubrimos con el mayor esfuerzo todo lo que está ocurriendo".
