Elena Gijón: "La maldad de Daesh no tiene límites"
Desde que Daesh empezó a llenar de sangre nuestras vidas, hemos tenido claras varias cosas: su maldad no tiene límites, cualquier objetivo les satisface y lo intentan siempre que pueden. Hoy ha sido en Manchester. Mañana en cualquier punto del planeta. Adultos o niños. A las alimañas les da igual. Produce vergüenza pensar que pertenecen al género humano.