Hace cincuenta años cuando Hollywood perdía a Marilyn Monroe, una de las más rutilantes estrellas del firmamento cinematográfico, el holandés Maarten Schmidt, descubría los cuásares. Uno sólo de ellos puede brillar como un billón de soles, como un billón de estrellas. Eso si que es luz. El Marqués de Salamanca, el mayor financiero español del siglo XIX, cada vez que le alcanzaba la quiebra y fueron varias, decía: "enceded todas las luces para que no se vea nuestra ruina". Pues eso es lo que necesita Europa y en especial la parte sur del Continente, miles de cuásares encendidos, relucientes, con luz cegadora que oculte al menos hasta septiembre nuestros problemas económicos. No hay dinero para pagar a los proveedores y eso que hace unos meses el Gobierno central prestó dinero a las Comunidades para que abonaran lo que debían. Pero el dinero se gasta y no alcanza el que tienen, lo reconocen en varias Comunidades Autónomas, incluso en Cataluña llegan aceptar que el único banco que les presta dinero es el Gobierno de España. En Andalucía, su presidente Griñán sigue erre que erre con la rebelión a Rajoy y afirma que hacer recortes es como pegarse un tiro en el pie. Lo malo es que en el Ministerio de Defensa ya no queda dinero ni para munición. Alemania, Europa, el Banco Central han dado una tregua hasta septiembre. Algunos creen que el rescate suave es cosa de colocar la fecha. Otros piensan que el Gobierno lo puede torear en el último momento y de ahí el plan bianual, con el recorte de 102.000 millones de euros de aquí al 2014, o lo que es lo mismo, el 10% del PIB o lo que España se gasta en pensiones en un año. Los analistas no saben de toros pero creen que de una forma o de otra nos pilla el tren. Gracias que cada dos por tres los del ferrocarril están de huelga.
Minuto económico: Marilyn y los cuásares
Hace cincuenta años cuando Hollywood perdía a Marilyn Monroe, una de las más rutilantes estrellas del firmamento cinematográfico, el holandés Maarten Schmidt, descubría los cuásares. Uno sólo de ellos puede brillar como un billón de soles, como un billón de estrellas. Eso si que es luz. El Marqués de Salamanca, el mayor financiero español del siglo XIX, cada vez que le alcanzaba la quiebra y fueron varias, decía: "enceded todas las luces para que no se vea nuestra ruina". Pues eso es lo que necesita Europa y en especial la parte sur del Continente, miles de cuásares encendidos, relucientes, con luz cegadora que oculte al menos hasta septiembre nuestros problemas económicos. No hay dinero para pagar a los proveedores y eso que hace unos meses el Gobierno central prestó dinero a las Comunidades para que abonaran lo que debían. Pero el dinero se gasta y no alcanza el que tienen, lo reconocen en varias Comunidades Autónomas, incluso en Cataluña llegan aceptar que el único banco que les presta dinero es el Gobierno de España. En Andalucía, su presidente Griñán sigue erre que erre con la rebelión a Rajoy y afirma que hacer recortes es como pegarse un tiro en el pie. Lo malo es que en el Ministerio de Defensa ya no queda dinero ni para munición. Alemania, Europa, el Banco Central han dado una tregua hasta septiembre. Algunos creen que el rescate suave es cosa de colocar la fecha. Otros piensan que el Gobierno lo puede torear en el último momento y de ahí el plan bianual, con el recorte de 102.000 millones de euros de aquí al 2014, o lo que es lo mismo, el 10% del PIB o lo que España se gasta en pensiones en un año. Los analistas no saben de toros pero creen que de una forma o de otra nos pilla el tren. Gracias que cada dos por tres los del ferrocarril están de huelga.