Hola Juan Diego, muy buenos días a todos. ¿Cuántas veces nos hemos visto ante una bandeja de comida ingresados en un hospital y nos hemos preguntado… pero quieren que me cure no? Pues hasta el 2025 no han caído los gobernantes en que algo pueden hacer para mejorar el aspecto y el contenido de la dichosa bandeja: un Real Decreto en ciernes abierto a su dotación a colectivos implicados para que hasta el 21 de junio lo doten de mejoras para una alimentación saludable y sostenible en centros sanitarios y residencias.
Quedarán fuera los ultraprocesados y quedarán encumbrados pescados, legumbres y verduras. ¡En el lanzamiento de la iniciativa, la nutricionista Beatriz Robles afirmó que la media de la estancia hospitalaria puede alargarse 3 días si la desnutrición se produce durante el ingreso! Y si ya navegamos entre los números de las residencias, que oscilan entre el 28 y el 60%, llegamos a una afirmación lapidaria: ¡qué peligro es hacerse viejo! Como ciudadano me sigo preguntando por qué nos ponen tan accesibles riesgos demostrados para nuestra salud. En la vitrina de un súper o en una máquina de vending. Si hay una alineación consabida de productos nocivos, con vínculos claros con enfermedades y mermas… ¿Se puede saber por qué se siguen fabricando? ¡Menos mal que hay cabeza colectiva, amigos, que tengáis un feliz sábado!