Cerdá explica que "Arturito Pomar desprende fascinación, su figura, fue un niño fuera de lo común que a los 5 años jugaba al ajedrez, a los 13 logró la hazaña de competir contra el mejor del mundo" y que por ello escribió su libro 'El peón'. Además, recuerda que llegaron a apodarle "El Mozart del ajedrez".
Por otro lado, comenta cómo cayó su figura cuando fue creciendo, "Arturo Pomar nunca estuvo a la altura de Arturito Pomar y esto pesó siempre sobre sus hombros".