John Müller: "Con Carmen Rodríguez Quijano estamos ante otro caso típico de bloqueo de los sentidos ante la existencia de signos externos de riqueza"

El fiscal sospecha que la operación encubre un pago de favores a Ortega por contratos adjudicados a la red de corrupción en su municipio.

Rodriguez Quijano, que enfrenta una petición de la Fiscalía de 35 años de cárcel, compró una vivienda a la empresa Sundry por 385.000 euros pero dice que no sabe cómo la pagó. Tampoco explicó cómo consiguió un crédito de Caja Madrid, entidad de la que además era consejera general designada por el Ayuntamiento de Majadahonda donde era jefa de gabinete del alcalde. Según su testimonio, Rodríguez Quijano, fue el notario el que le dijo que se estaba comprando una casa y que le habían dado un crédito para ello.

¡Oh, sorpresa! Como si fuera un Bingo, el notario cantó adjudicado y a ella le cayó un piso con su crédito y su canesú.

El escritor Noel Clarasó decía que “es muy difícil saber todo lo que hace falta y mucho más difícil ignorar todo lo que hace falta ignorar”. Parece que con la señora Quijano estamos ante otro caso típico de bloqueo de los sentidos ante la existencia de signos externos de riqueza, como coches de lujo de marcas felinas o pisos.

El filósofo chino Confucio decía que “la ignorancia es la noche de la mente”, pero Diderot sostenía que “la ignorancia está más cerca de la verdad que el prejuicio”. Ahora le tocará al tribunal decidir qué noción de la ignorancia corresponde aplicarle a la señora Quijano.