Víspera del fin de semana de Fallas. Esperando ya al fuego purificador que nos conduce a la primavera.
La semana, entretenida está siendo. Entre el sofoco de la cosa bancaria y el enredo de la cosa tamámica (o sea, de Tamames) se nos ha colado este capítulo impagable de gente despistada que no sabe ni qué descuentos le aplican, ni qué cobra ni por dónde se anda. Y de gente que gobierna el país pero ignora lo dicen las normas que ellos mismos aplican o reforman. Hay para todos.
Ya contamos ayer que el Gobierno anuncia su intención de cambiar el bono térmico al constatarse que, en efecto, pueden cobrarlo las familias numerosas por el mero hecho de ser numerosas, da igual su renta. Que en realidad lo que tendrá que cambiar es el bono social, que es el origen del bono térmico. Ha puesto el Gobierno el grito en el cielo, ha fingido escándalo y ha cruzado los dedos para que no se descubra ahora que algún ministro con familia numerosa también lo cobra.
Que el Gobierno desconozca la norma es para pellizcarse o para tirarse de los pelos
Éste es un caso verdaderamente sorprendente de desconocimiento de la norma que está en vigor desde hace años. Y que quien la desconozca sea Mónica García, líder de Más Madrid, tiene su aquel porque ella misma es beneficiaria. Pero que la desconozca el gobierno que la ha ido revisando y ampliando en los últimos años es para pellizcarse o para tirarse de los pelos. Mónica García pidió ayer disculpas por haber cobrado una ayuda que ella entiende que no necesita porque de ingresos va holgada.
Lo que pasa es que alegó que el bono te lo descuentan automáticamente y que por eso no sabía que lo percibía. Y le corrigió bien el socialista Lobato. Porque lo que te descuentan automáticamente, salvo que renuncies, es el nuevo bono térmico, pero para recibirlo tienes que ser beneficiario, antes, del bono social. Y ése sí que hay que pedirlo. En cuanto Mónica García haga otra indagación doméstica descubrirá que, en algún momento de los últimos años, su familia ha solicitado expresamente el bono social por ser familia numerosa y aun yendo desahogados de ingresos. ¿Por qué? Porque todas las familias numerosas de España, a efectos eléctricos, están consideradas familias vulnerables. No ahora, por la crisis de Ucrania. Esto viene de la crisis anterior, aquellos tiempos en los que tanto se hablaba en el debate público, a diferencia de hoy, de la pobreza energética.
"El Gobierno actúa como si nunca se hubiera leído lo que ahí pone"
Año 2017. Gobernando Rajoy se estableció el bono social, un descuento en la tarifa para consumidores vulnerables. Y desde entonces está establecido que un consumidor vulnerable es quien esté en posesión del título de familia numerosa. Ya está. También lo es quien no supere un determinado umbral de renta. Pero ser familia numerosa te convierte en consumidor vulnerable. Desde 2017 hasta hoy. El Gobierno actual modificó este decreto por última vez hace un año. No sólo no tocó lo que afecta a las familias numerosas, es que ahora actúa como si nunca se hubiera leído lo que ahí pone. Salen en tromba las ministras, Ribera, Rodríguez, Calviño, Montero a dolerse de que las familias numerosas Ossorio y García sean beneficiarias del bono social y su añadido el bono térmico.
Seis años lleva en vigor la definición de familia numerosa como consumidor vulnerable, seis años. Pero ahora dice la ministra de Hacienda que esto es un efecto indeseado. Y Mónica García dice que quiere devolverlo. ¿Sólo el bono térmico, que es el último, o también el bono social? ¿Y desde hace cuántos años?
El debate es bien interesante. Porque Más Madrid predica que las ayudas sociales deben estar vinculadas al nivel de renta. Y el Gobierno, parece que también. ¿Todas? ¿Sólo caben ayudas por tener (pocos recursos), o también por ser (ser joven, ser mayor, ser automovilista, no serlo)? ¿Es partidario el Gobierno de revisar todas las ayudas a las familias numerosas ---tampoco son tantas--- y restringirlas a las que tengan poca renta? ¿Es eso lo que está diciendo?
¿No es el Gobierno que aprobó un descuento para jóvenes por el hecho de ser jóvenes, el bono joven, da igual la renta de que disponga el joven? ¿Caben ayudas a los mayores por el hecho de ser mayores o sólo si son mayores empobrecidos? ¿Hay que subir la pensión lo mismo al que cobra la mínima que al que cobra la máxima? ¿Hay que bonificar el transporte público sólo a quienes tienen una renta determinada? ¿Es un escándalo que un tipo con cien mil euros de sueldo pueda usar el cercanías gratis o es perfectamente razonable? El debate promete. Qué mejor momento para plantearlo que una campaña electoral. ¿Qué opina Sánchez?
Luego tenemos a la gente que no sabe dónde estaba. Ejemplo: alguien que no sabía que estaba afiliado a un partido y lo descubre cuando va a presentarse a las elecciones por otro. Qué cosas están pasando esta semana. Miguel Ángel Montenegro. Iba de seis en la lista de Carolina Darias, ministra saliente, al ayuntamiento de Las Palmas. El PSOE difundió un sucinto comunicado ayer en el que le agradece que haya dado ‘un paso al lado’ en beneficio del proyecto. O sea, que se ha borrado de la lista. Pero el comunicado no dice por qué. ¿Qué problema tiene de pronto el candidato socialista? Pues que lleva treinta años militando ¡en el PP! Pero qué me estás contando, Carolina. Lo que oyes: que el amigo Montenegro le ha escrito a la ministra para explicarle que fue un familiar quien le afilió al PP en 1989 y él ni se acordaba. No debe de acordarse ni de por qué se dejó afiliar. Porque su corazón, en realidad, es socialista. Su corazón, que no su carné, porque concurría como independiente. Ahora se queda sin puesto de concejal de izquierdas y sin carné de militante de derechas, porque los del PP le han abierto expediente con idea de expulsarle.
En España, a diferencia de otros países, no se puede militar en varios partidos a la vez
En España, a diferencia de otros países, no se puede militar en varios partidos a la vez. Aquí se entiende que si llevas la camiseta de uno no puedes llevar la camiseta de otro. En el fútbol, sí. Puedes tener un equipo principal y otro, secundario. Lo dice la gente: yo soy del Madrid y después, del Español. Soy del Barça y del Rayo. Pero en política, no. Nadie es del PSOE y, después, de Podemos. O al revés, de Podemos y un poco del PSOE. El único caso era Errejón y se quedó a mitad del puente, gracias a eso existe Más Madrid. Y Más País, que es lo que Tamames habría llamado Más Nación de Naciones. Porque Tamames se ha destapado como lo más transversal del Parlamento al que no pertenece.
Estaba ayer Abascal venga a presumir de transversalidad de su moción de censura. Que si encantado de que Tamames no coincida con Vox en mil cosas, que así representa a más gente. A ver, así lo que puede pasar no es que represente a más gente, sino que represente menos a Vox. En rigor, Tamames no representa a nadie. Se representa a sí mismo. No le ha votado nadie. Y al paso que va, el miércoles pueden pasar dos cosas: que no le vote ni Vox o que le voten todos en atención a lo ecléctico de sus posiciones. Podemos podrá aplaudirle su posición crítica con Europa en la guerra de Ucrania, que ahí está un poco en Belarra; Esquerra y Bildu podrán celebrarle que conceptúe a Cataluña y el País Vasco como naciones, que ahí está entre Artur Mas y Joaquim Torra; el PSOE podrá hacer causa común con él en su crítica a los trasvases y su empeño en las desaladoras, que en eso es puro Narbona; el PP podrá festejarle su crítica a la reforma laboral y la de las pensiones, que ahí está un poco en Garamendi; y Vox… Vox podrá aplaudirle… Vox podrá ponerse en pie para aplaudirle… cuando termine, por el alivio que sentirán los de Abascal al ver que ya queda menos para que pase el trance. En qué hora, Santi, en qué hora. Que te dejas liar por Dragó. Que va a tener razón Olona, que eres un títere.