LA PRIMERA DE LA MAÑANA

Marta García Aller: "No nos habremos puesto morenos, pero para la sequía el tiempo ha sido bueno"

Marta García Aller reflexiona sobre las lluvias de esta Semana Santa en casi toda España, un "mal tiempo" que en periodos de sequía y cambio climático ha pasado a ser una buena noticia.

Marta García Aller

Madrid | 01.04.2024 07:45

¿Qué tal las lluvias… digo… qué tal la Semana Santa? Pero mira, como nunca llueve a gusto de todos, hay buenas y malas noticias. Las malas, para el turismo de los que aspirábamos a ponernos morenos. Pero esta cruz de los cofrades que miraban al cielo con resignación y de los bañistas con gabardina tiene también su cara.

Al fin y al cabo, cómo vamos a llamar mal tiempo a las lluvias. ¿Mal tiempo no es acaso la sequía? ¿Y las olas de calor extremo? Eso sí que es mal tiempo. Lo de que el mal tiempo fuera el lluvioso, eso era antes.

Antes de que hiciera falta las lluvias como agua de marzo para los embalses, antes de que viviéramos la sequía más larga en muchas décadas, antes de que las temperaturas extremas fueran cada vez más frecuentes y los incendios en verano más virulentos que nunca. Antes de que la lluvia hiciera falta para que vuelva a salir agua del grifo en pueblos que llevaban un año sin agua potable.

Las lluvias de Semana Santa no solo han llenado pantanos, también ayuda al campo y a que los ríos y los montes estén menos secos y vulnerables al fuego.

Y al turismo, porque para el turismo también la sequía es mala. El ministerio de Exteriores en Alemania ya estaba avisando a sus viajeros de las restricciones de agua en Cataluña en hoteles y playas y los medios británicos avisan a los suyos de problemas con la sequía en la Costa del Sol. Esta lluvia no arregla el problema pero dará un respiro.

Hay otra buena noticia con tanta lluvia para consolar los planes fallidos. Gracias al temporal (porque a la lluvia ya no le llamaremos mal tiempo, pero un temporal es un temporal), pues gracias al temporal el coste de la electricidad se ha desplomado. Con el tirón de la energía eólica y la hidráulica, hoy el megavatio hora va a tener un precio negativo. A los consumidores no nos va a salir a devolver, pero oye, algo es algo.

¿Moraleja?

No nos habremos puesto morenos, pero para la sequía el tiempo ha sido bueno.