con sergio del molino

Chaves Nogales, periodismo pionero en avión (y sus obras completas)

En Más de uno hablamos con Sergio del Molino e Ignacio F. Garmendia del periodista y escritor Manuel Chaves Nogales.

ondacero.es

Madrid | 23.11.2020 12:08

Sergio del Molino e Ignacio F. Garmendia hablan en Más de uno sobre el periodista y escritor Manuel Chaves Nogales.

Carlos Alsina nos pone el inicio de la que se considera la primera retransmisión masiva de radio. Fue en Estados Unidos en 1927. En ella se escucha al locutor deportivo Graham McNamee, contando en directo a 30 millones de personas el regreso triunfal del aviador Charles Lindbergh a América, después de haberse convertido, un mes antes, en el primer hombre en cruzar el Atlántico volando sin escalas y de oeste a este.

Los años 20 fueron la década de los pioneros de la aviación. Volar era, todavía, algo exclusivo de aventureros y militares. Sólo conseguir despegar sin inconvenientes y aterrizar justo donde se quería ya era todo un éxito. En España destacó Ramón Franco, protagonista del "Vuelo del Plus Ultra", que unió Palos de la Frontera y Buenos Aires, pero también aparece en nuestras hemerotecas una joven americana llamada Ruth Elder. En 1927 Elder voló de Florida hasta las Azores y fue recibida como una heroína en Lisboa, donde periodistas de todo el mundo intentaron describirla.

El periodista Manuel Chaves Nogales, que trabajando para el periódico el Heraldo de Madrid cubrió los fastos que acompañaron a la aviadora en Portugal y en España. Chaves llegó, incluso, a volar con ella y otros periodistas desde Lisboa hasta Madrid a bordo de un avión trimotor Junkers. La serie de artículos que Chaves dedicó a Ruth Elder le valieron, con sólo 30 años, el prestigioso Premio de periodismo Mariano de Cavia. Y en todas estas crónicas premiadas destacaba una idea recurrente, un mantra que había acuñado el periodista para intentar definir su propia época: El tiempo es aviador.

Un año después, Chaves lo llevó a la práctica. Se enroló él mismo en una aventura seriada para su periódico. Tituló a tres columnas el Heraldo de Madrid: "Nuestro redactor jefe, señor Chaves Nogales, dará la vuelta a Europa en avión". Chaves Nogales recorrió 16.000 kilómetros en avión, una decena de países distintos y llegó hasta el corazón de la Unión Soviética. La tecnología de la época le permitió desplazarse en tiempo record y poder enviar sus crónicas con éxito, que hoy podemos leer recopiladas en su libro 'La vuelta a Europa en avión: Un pequeño burgués en la Rusia roja'. No es la obra más destacada ni más famosa de Nogales, pero quizá sí la que mejor define su afán de avance tecnológico y de periodismo viajero.

Ignacio F. Garmendia no ha recorrido 16.000 kilómetros en avión pero sí ha empleado, lo cuenta él mismo, cerca de 3.000 horas para reunir, revisar, reformular y completar las obras completas de Manuel Chaves Nogales para la editorial Libros del Asteroide. 3.600 páginas y cinco tomos. "Toda la obra de Chaves se publicó en los periódicos, tanto la narrativa como la periodística", dice y cree que su enorme éxito se debe a "la modernidad, frescura, gracia y la ironía de su prosa". Asimismo, recuerda que era un ferviente defensor de la democracia parlamentearia, algo muy poco popular en aquella época. También explica que han encontrado 68 piezas que no conocían en esta recopilación de textos.

Por otro lado, analizan la visión que tenía Chaves Nogales respecto a la Guerra Civil, de Europa y cómo intentaba detallar en España todo lo que sucedía fuera de nuestras fronteras.

Además, Sergio del Molino se posiciona en favor de Louise Gluck que tras ganar el Premio Nobel, en respuesta, ella (o, más concretamente, su agente, apodado El Chacal) llama inmediatamente a una editorial española que apostó por publicar sus libros cuando ella no era nada conocida, la editorial Pre Textos. Y exige finiquitar contrato y también la destrucción de todos los ejemplares ya imprimidos. Al parecer, según los propios editores han confesado, reeditaron un libro cuyos derechos habían caducado (es decir, lanzaron una edición ilegal), y ese podría ser el motivo principal por el que les rescindieron el contrato. "Ningún editor hace un favor a un editor por publicarlo, hay una relación profesional", dice.