José Ramón de la Morena: "Radomir Antic se va con una historia y con un currículum envidiable"

Antic no murió por la epidemia de coronavirus. Un problema hepático le produjo una pancreatitis, que en la mañana de ayer le invadió en una septicemia todo el cuerpo hasta provocarle la muerte. Se va con 72 años, los mismos con los que se fue Jesús Gil. Se va con una historia y con un currículum envidiable de haber entrenado al Madrid, donde le cesaron siendo líder, después al Atleti, donde en el mismo año ganó Liga y Copa, y finalmente el Barça, donde comenzó a construir y a poner los cimientos de aquel gran equipo que luego pulió Pep Guardiola.

Antic era un tipo duro como profesional. Firme y muy seguro en sus planteamientos, pero entrañable en la vida familiar y con sus amigos. Compartí con él muchos días y noches en aquella Eurocopa de Bélgica y Holanda en la que nos eliminó Francia por aquel penalti en el que a Raúl se le fue el balón por encima del larguero. Era un hombre dedicado totalmente al fútbol, y se veía los partidos incluso en la bañera de su cuarto de baño donde tenía también una televisión. En realidad el deporte en general le apasionaba, también el baloncesto del que hablaba y entendía como un técnico más.

Afable, educado y agradable, defendía la historia y las razones políticas del pueblo serbio, al que consideró humillado y atacado por las fuerzas de la OTAN cuando la guerra de los Balcanes. Ese tema era mejor no discutirlo con él. Después, cuando le hicieron abuelo, se fue haciendo más bizcochón, y finalmente llegó esa enfermedad que ayer se lo llevó. Descanse en paz Radomir Antic