Con motivo del comienzo del juicio por el atentado, en 2015, a la redacción de Charlie Hebdo, la revista satírica que publicó una viñeta de Mahoma en 2006, esa misma viñeta saldrá en su portada, junto otros 11 dibujos por los que la publicación recibió amenazas. Amenazas que finalmente se cumplieron el 7 de enero de 2015, cuando un grupo yihadista mató con fusiles de asalto a 12 personas en la redacción de la revista y dejó 11 heridos. Por ello, Carlos Alsina entrevista en Más de uno al primer ministro de entonces, Manuel Valls. En el juicio, que durará 49 días, hay 14 acusados, 144 testigos y 200 partes presentadas como acusación particular.
Valls asegura que "fue un año terrible", pero explica que al mismo tiempo vivieron una "reacción increíble de los franceses". "Éramos todos Charlie, París era la capital del Mundo, la capital de la libertad, de la democracia y de la libertad de prensa que es tan importante", dice.
Por esta razón la revista va a volver a publicar las caricaturas, "es una forma de defender la libertad de pensamiento, de expresión, frente al terror y también una manera de burlarse de la religión". Y sostiene que "el derecho a ofender es un derecho de nuestras sociedades democráticas, una libertad absoluta".
Asimismo, cree que antes eran los estados quienes prohibían la libertad de expresión, mientras que ahora "el problema viene más de las sociedades, como si hubiera una forma de autocensura".
Por otro lado, considera que "esta amenaza sigue presente en el Mundo", sobre todo en los países musulmanes, a pesar de la derrota de Daesh. Porque, según apunta, "hay personas que se pueden radicalizar de un día a otro y que pueden golpear de cualquier forma". Asimismo, critica que en España se use de una manera incorrecta el fascismo, "aquí en España se trata a la gente en pocos minutos de facha", afirma y añade que "el fascismo es ese movimiento totalitario de imponer la religión por encima de la democracia".
Discurso de Sánchez
En cuanto a la petición de "unidad" por parte del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, durante su discurso en la Casa de América de Madrid, Valls declara que tiene espíritu, pero añade que también hace falta práctica. También alega que la situación actual de la pandemia del coronavirus y la crisis económica "impiden más que nunca la unidad de los grandes partidos constitucionalistas".