"No informé a mis superiores sobre mi sociedad regularizada porque lo consideré irrelevante", declara. También piensa que no existía incompatibilidad con su cargo y defiende que ha cumplido rigurosamente con la legalidad.
Por otro lado, reconoce que tiene pendiente una conversación con el Fiscal General del Estado, José Manuel Maza, y que no tiene ningún apego al cargo de fiscal Anticorrupción, por lo tanto, asegura que "cualquier solución me parece razonable".