Banco Mediolanum aterrizó en España hace veinte años con un modelo pionero basado en una red de asesores financieros personalizados. “Cada cliente tiene asignado un profesional de las finanzas —que llamamos Family Banker— que le ayuda a tomar las mejores decisiones”, ha explicado Igor Garzesi, Consejero Delegado de la entidad en conversación con Carlos Alsina en Más de Uno.
Garzesi ha resaltado que la confianza ha sido “desde el primer minuto” un factor determinante “que hay que ganarse trabajando muy bien día a día”. Por ello, “durante el confinamiento hemos triplicado los contactos con los clientes, gracias a nuestros asesores financieros”. Eso se ha traducido en que “Banco Mediolanum sea la entidad que tiene los clientes más satisfechos del mercado español”, según el último estudio del sector realizado por la consultora independiente Stiga.
La crisis sanitaria ha obligado a la entidad a adaptarse a la realidad. “Lo hemos hecho porque tenemos toda la tecnología para mantener los servicios activos y también algo muy importante, el contacto humano”.
En contextos de crisis, “es habitual que los ahorradores tiendan a huir de los mercados financieros”, ha comentado, “lo que se traduce en una pérdida segura, pero también se van a perder la recuperación de ese mercado. Algo que, según Garzesi, “no pasa con nuestros clientes porque al lado tienen un Family Banker que le va a ayudar a tomar la mejor decisión”.
Todo ello ha propiciado que la entidad tenga “una ratio de solvencia que es el doble de la media del sector español” y vislumbre un futuro de nuevas incorporaciones. “Estamos inmersos en un proceso de crecimiento de nuestros profesionales, de nuestros Family Bankers”.