CON RAFA LATORRE

Monólogo de las ocho: "Ya no es fácil ser votante de Ciudadanos"

Rafa Latorre reflexiona en su monólogo de 'La brújula' sobre la selección de Sevilla para acoger la sede de la Agencia Espacial Española y de La Coruña para la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial. Además, habla de la crisis interna de Ciudadanos.

Rafa Latorre

Madrid | 05.12.2022 19:20

Los sevillanos y los coruñeses tienen motivos para sentirse, porque les ha tocado un premio en la lotería de la descentralización.Sevilla albergará la sede de la Agencia Espacial Española y La Coruña acogerá la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial. Son buenas noticias para ambas ciudades, dos grandes ciudades, en las que se da la circunstancia de que gobierna el partido socialista que se sospechaba que sería el último requisito de la lista de requisitos que se le demandaban a las candidatos en este concurso de la descentralización.

Hombre, no iba el Gobierno a privarse de premiar a dos de sus grandes ayuntamientos a unos meses de que sus respectivos alcaldes se la jueguen en unas municipales.

En cualquier caso, ambas ciudades son dos grandes urbes perfectamente equipadas para acoger estos organismos y no sólo… tienen además algo esencial… son lugares muy atractivos para vivir y eso seguro que lo agradecerán los trabajadores de la Agencia Espacial Española y de la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial.

El alcalde de Sevilla, el socialista Antonio Muñoz Martínez está exultante, tan exultante que casi ve florecer una nueva época dorada para la ciudad.

Escuchábamos a un hombre exultante, el alcalde de Sevilla. Inés Rey, Alcaldesa de La Coruña, está igualmente eufórica hoy.

El enésimo requisito era el ser una ayuntamiento socialista… pero, claro, este es un requisito, no una garantía

Sin embargo todo concurso tiene sus damnificados, como es norma. Decíamos que el enésimo requisito era el ser una ayuntamiento socialista… pero, claro, este es un requisito, no una garantía… porque otros ayuntamientos optaron incluidos alguno socialista y hoy está clamando al cielo por la oportunidad perdida. Fíjense que hace unos días en la tertulia de la Brújula, Javier Caraballo decía: ojo, que estas críticas tan ácidas que está soltando Javier Lambán contra Sánchez, podían tener algo que ver también con que ya sabía que Aragón se quedaría con un palmo de narices. Hoy tras conocer las designaciones, el Gobierno de Aragón ha manifestado su "profunda decepción" porque considera que la elección se ha basado más en criterios "políticos y electorales" en vez de técnicos y ha anunciado que seguirán con las acciones judiciales emprendidas contra los criterios fijados para la selección.

Otro lugar donde ha cundido la decepción es en León. Hace poco hacíamos allí la Brújula, entrevistábamos a su alcalde, José Antonio Díez, y comprobábamos que no era un político dócil y complaciente, de estos que asumen lanares lo que les ordenan desde la sede central del partido, o desde la Moncloa. El alcalde de León hoy está muy enfadado. Ha hablado con nuestros compañeros de Onda Cero en Castilla y León y dice que se siente abandonado tanto por el gobierno autonómico como por el nacional, del que además dice que ya se ve, ya siente, cuál es su verdadero apoyo y solidaridad con la España vacía.

El problema de la subasta es que por cada beneficiario, quedan cien damnificados y mil suspicacias, así que hoy en España convive la euforia de Sevilla y La Coruña con la decepción de Aragón, León y tantos otros territorios que se consideran olvidados.

Lo último que necesita este partido es una agonía entre estertores de división

¿Qué está ocurriendo en Ciudadanos? Hombre, convengamos en que ya no es fácil ser votante de Ciudadanos. Hubo un tiempo en que sí lo era. El de Ciudadanos era un voto sexy, además de tener una indudable utilidad como fuerza moderadora de las pulsiones recalcitrantes de izquierda y de derecha. Pero ahora no es fácil ser votante de Ciudadanos y prueba de ello es que todas las encuestas anticipan su evaporación.

Lo último que necesita este partido es una agonía entre estertores de división. La refundación puede terminar siendo una refundición, porque además se pueden estar dibujando dos corrientes que terminen por confundir aún más a un electorado que ya no andaba demasiado centrado. Porque hay una diferencia… más que evidente… una diferencia letal entre la centralidad y la indefinición. Puede que el centro exista, en España ha sido siempre de una fugacidad eléctrica, pero puede que exista y si existe desde luego no es sinónimo de indefinición.

A ver, veamos cuáles son las dos posturas en liza. Más allá de lo partitocrático, es decir de los nombres… Arrimadas dice que Edmundo Bal convenció al grupo parlamentario para que apoyase la nefasta ley del sí es sí. Claro, esto desde luego es un problema… porque ha hecho que Ciudadanos sea corresponsable de uno de los grandes fiascos de la legislatura. Miren, qué útil sería que los diputados tuvieran libertad de voto, para saber quiénes votaron en conciencia y quienes lo hicieron por disciplina. Por otro lado… Bal es penalista… Debería saber algo más de cuestiones penológicas que Irene Montero y Ángela Rodríguez Pam. La propuesta de Bal tiene otra debilidad y es esto de los acuerdos con Sánchez, que está bien esto de emprender el enésimo intento de salvar al psoe de sí mismo, pero parece que se ha olvidado de que Arrimadas se desgañitó tendiéndole la mano a Sánchez para ser su apoyo de legislatura y una vez más se demostró que no se puede salvar a quien no desea ser salvado, porque Sánchez prefirió solidificar su mayoría con Bildu y Esquerra.