LA BRUJULA

La mirada cítrica: "El mercado energético está descontrolado"

Ignacio Rodríguez Burgos analiza con su particular visión la actualidad económica en La Brújula

ondacero.es

Madrid | 28.09.2021 21:18

Cuando en Europa se hablaba de transformación energética nadie esperaba que la electricidad se iba a encarecer como lo está haciendo. Mañana en España se marcará un nuevo récord histórico en los 190 euros el megavatio hora de media. A las nueve de la noche se superará la barrera de los 200 euros, escalará hasta los 208 euros el megavatio. Desde las organizaciones de consumidores se indica que el encarecimiento se ha comido el ahorro que se había conseguido con la rebaja de los impuestos. Las medidas del Gobierno se han fundido como los plomos. El mercado energético está descontrolado. Por ahora no hay manera de encauzarlo.

Por primera vez en tres años, el precio del petróleo ha saltado por encima de los 80 dólares y el gas sigue con su especial escalada deportiva. La Comisión Europea va a proponer el martes de la semana que viene compras conjuntas de gas en el Continente para rebajar precios.

Europa tiene catedrales góticas, industrias tecnológicas avanzadas, columnas dóricas y una gran industria automovilística, robótica, automatización. Es una de las economías más ricas y desarrolladas del planeta pero apenas tiene fuentes energéticas. Depende de los países petrolíferos y de los gasísticos. Y el norte del Continente depende del abrazo ruso, del abrazo de Vladimir Putin.

En el caso de España hay un cordón estratégico que nos une con el norte de África, con Argelia. Hay dos gasoductos, el directo hasta Almería, el Medgaz, y el que pasa por Marruecos. Argel ha decidido cortar el suministro por este último canal por sus diferencias diplomáticas con Rabat. El jueves, el ministro de exteriores español cruzará el Mar de Alborán para garantizar el suministro de gas argelino, que el invierno está cerca. Hay que recordar que desde el desierto argelino llega un tercio del gas que consumimos en nuestro país este año.

Los altos precios de la energía están provocando, a su vez, un aumento de la inflación. Y esto no solo adelgaza el bolsillo de los ciudadanos y vacía la tesorería de las empresas, es que asusta a los inversores. Las bolsas occidentales presentan hoy grandes recortes. La española ha cerrado con un descenso superior al 2 y medio por ciento, mientras el Gobierno aprueba la subida de 15 euros en el Salario Mínimo y el plan de aeropuertos con una congelación de tarifas, eso sí, sin la ampliación de El Prat. Y todo esto cuando el dinero vuela. ​