El programa tripulado de la NASA recibió un empujón con el anuncio de que SpaceX va a construir su módulo lunar. De repente, parece posible que vayamos a volver a la Luna en esta década. Ir a la luna cuesta mucho dinero y nadie está muy seguro de que EEUU tenga la voluntad para hacerlo. La NASA está diseñando un nuevo cohete gigante porque la tecnología que nos llevó a la luna se dejó de fabricar.
La nave ha elegido una nave muy ambiciosa que abre la puerta a otros proyectos como el de ir a Marte. Se plantea hacer una estación espacial en la luna que puede facilitar el proceso. El contrato demuestra que EEUU va muy en serio con su plan de volver a la lunas. La oferta de SpaceX a EEUU ha sido con diferencia la más barata y es de 2900 millones de dólares.
El experto Daniel Marín nos da detalles de cómo podría ser ese proyecto: "Allí les estaría esperando el módulo lunar. Los astronautas pasarían a este módulo, aterrizarían en la Luna, estarían aproximadamente una semana. Sería la primera mujer que pisaría la Luna."