Javier Rodríguez, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha matizado en La Brújula sus declaraciones en las que decía que la enfermera infectada con el ébola mentía. “Ha tardado mucho en decir lo que había hecho, nos hubiera evitado un quebradero de cabeza”. Insiste que la enfermera se encontraba bien, y una de las razones que da es que la enfermera acudió a depilarse después de salir del hospital. “Tan mal no debía estar para ir a la peluquería”.
El consejero defiende que la enfermera “cuando llamaba, las cifras de fiebre eran más bajas que el riesgo de ébola”, “si ella ha tenido fiebre baja y ha sido contagiada, no sé si se habrá tomado bien la temperatura” o “si ha cambiado el comportamiento del virus en Europa”. Indica que el uso de medicamentos como el Paracetamol, que reducen la fiebre, ha podido influir. “Las cifras de fiebre eran sin riego, un patrón anormal, puede ser que los criterios de contagio sean distintos en África que aquí. Cuando uno tiene fiebre, se toma Paracetamol y la fiebre te baja”
Nos confirma que en estos momentos hay ingresada una persona contagiada (la enfermera) y tres personas más. “Hay una personas con la enfermedad declarada, un ingeniero ingresado que puede recibir el alta esta misma noche si da negativo, una enfermera y una auxiliar con poca fiebre pendiente de hacer la prueba. Y en observación sin síntomas, el marido, la médico que la atendió privada, el Suma, y quien le atendió en Alcorcón. Y hay unas ochenta personas en situación preventiva”.
El Consejero ha vuelto a defender la actuación que desde el primer repatriado. “Estos protocolos son los mismos que se utilizaron con el hermano Pajares y no pasó nada”, “los accidentes ocurren”.
