El mundo de las criptomonedas vuelve a estar efervescente. El bitcoin ronda los máximos históricos de noviembre de 2021 cuando casi supera los 69.000 dólares. En los últimos siete días la criptomoneda reina ha subido más de un 25%, con una tasa de dominio por encima del 52%.
Sin embargo, la inversión en criptoactivos suscita pasiones encontradas. A los que dudan que es una actitud muy sana, convendría recordarles que el 5 de febrero de 1637 un especulador pagó 90.000 florines holandeses por un lote de 99 bulbos de tulipanes. Esta operación, que se considerada el clímax de la burbuja con la flor típica de Holanda, fue el preludio de la ruina.
Cada semana instituciones y profesionales sólidos advierten del enorme riesgo que se asume al invertir en criptomonedas. Según el Informe Nativo digitales y millenials: comportamientos y estrategias frente al ahorro que han elaborado de forma conjunta el IE Fundation y la Fundación Mutualidad de la Abogacía, las criptomonedas son el activo de inversión más popular entre los más jóvenes. El 50% de las personas de entre 20 y 29 años las poseen en su cartera de inversión.
El bitcoin sigue valiendo cero
El Banco Central Europeo advirtió hace diez días que el bitcoin sigue valiendo cero. Pero, hoy se intercambia a 66.000 dólares. La entidad ha señalado que "ha fracasado en su promesa de ser una moneda global y descentralizada" y reclama una regulación estricta "hasta prácticamente prohibirlo".
Hay libertad para arruinarse con tulipanes, con sellos o criptomonedas. Pero, si un día no valen nada, que no se pretenda endosar la pérdida a los demás.