Adriansens explica que no es un cuadro cualquiera, ya que John Constable, es el primero que pintó el campo tal cua era porque todo lo anterior estaba pintado en el taller y no había ninguna realidad.
Constable fue un hombre que durante sus primeros años imitó a otros pintores que hacían paisajes, hasta que dijo: “me he cansado de perseguir cuadros y buscar una verdad de segunda mano, quiero hacer cuadros con una verdad de primera mano”; y se fue al campo. Pintó el paisaje que veía y de pronto el agua mojaba y las nubes parecía incluso que iban cambiando.
Para Juan Adriansens, esta es una de las joyas de la colección de Tita, porque te crees que estás dentro del paisaje, ya que el cuadro te absorbe. Por eso no entiende que haya decidido desprenderse de él.