El Gabinete lo dedicamos a hablar de política y mentiras, a raíz de la noticia de los datos del déficit del año pasado. Dichas cifras no eran correctas y el dato final se ha visto aumentado en tres comunidades donde gobernaba el Partido Popular (Madrid, Valencia y Castilla y León), ascendiendo así al 8’9%; aunque el Gobienro anterior también tiene culpa del dato, ya que escondió 2 puntos dell déficit.
La oposición, con Rubalcaba a la cabeza, ha afirmado que no ha habido engaño por parte de los socialistas a los populares. Gaspar Llamazares se pregunta si se debe de cesar al Secretario de Estado, responsable en ese momento. Esperanza Aguirre, por su parte, dice que ‘no me gusta gastar un euro más de lo que ingreso’ y que lleva un tiempo siendo cero el déficit de Madrid.
Javier Sádaba afirma que, lo primero que llama la atención, es que todos los políticos encuentran excusas. Dice que una cosa es equivocarse y otra cosa es mentir, ‘no es lo mismo una promesa no cumplida que una mentira’. Las mentiras como las que han hecho los políticos son sustanciales y hacen daño, con intención. Bajo su punto de vista existe la mentira ilustrada, es decir, mentir por el bien del otro, y la mentira que se da ahora, con el caso del déficit.
Elisa Beni dice que existe una relación directa entre poder y mentira, por lo que debe preocupar el que se mienta, pero más cómo descubrir las mentiras y encontrar responsabilidades; ‘algo que no se está sabiendo hacer, falta el control y responsabilidad’. Bajo su punto de vista ‘las mentiras son útiles y sirven, ya que cuando salen a relucir ya se ha conseguido lo que se quería con ellas’; acerca de esto, Sádaba cree que la máxima responsabilidad la tiene un político pero la última la tiene el ciudadano.
Antonio Naranjo afirma que lo que le preocupa es por qué fructifica la mentira política, cree que es por la desgana de los ciudadanos y la actitud de los medios; concluye que para conseguir que las cosas funcionen se tiene que utilizar la misma vara para todos.