EN 'JULIA EN LA ONDA'

Los gremios: 125.000 trabajadoras del sector textil en lucha

Cientos de miles de trabajadoras de toda España se han puesto en pie desde hace unos meses para mejorar sus condiciones de trabajo, que varían enormemente de una región a otra en España. Julia Otero entrevista a una trabajadora y un sindicalista que nos explica la importancia de alcanzar un convenio a nivel nacional.

ondacero.es

Madrid | 11.10.2023 20:07

A todo el mundo le gusta salir a comprar para renovar el armario de vez en cuando; sin embargo, pocas veces somos conscientes del trabajo que hay detrás de cada pantalón, camiseta o calcetines que compramos. El sector del comercio textil cuenta con cerca de 125.000 empleados - el 70% mujeres- que, desde hace unos meses, se están organizando para mejorar sus condiciones de trabajo. En la sección de Los Gremios en 'Julia en la Onda', en a la que conocemos la realidad de los diferentes sectores laborales, Beatriz Aliaga - trabajadora del textil- y Marcos Gutiérrez - de Comisiones Obreras- han venido a hablarnos de esta lucha que comenzaron las trabajadoras de HyM del País Vasco, y que se ha extendido por todo el territorio nacional.

Al ritmo de un curioso remix de la sesión de Shakira con Bizarrap, las trabajadoras de las tiendas de HyM pedían mejores sueldos, tal y como ha recordado Julia Otero en el programa de hoy. Esta protesta, sin embargo, no tardó en extenderse hasta la totalidad del sector, que ha conseguido abrir una negociación para conseguir crear el primer convenio colectivo de trabajadores del textil a nivel nacional. Este acuerdo unificaría las condiciones de trabajo en todo el país.

El caos de los convenios

"Hay una labor de mucho trabajo detrás de conseguir abrir una negociación como esta", ha afirmado Beatriz Aliaga, que lleva 20 años trabajando en el sector. La trabajadora ha querido destacar "el gran movimiento" que se ha dado entre todas las trabajadoras de España y también el "gran vuelco" de las asociaciones sindicales en el proceso. El "germen" de este hito, ha explicado Julia, fue el acuerdo alcanzado entre las trabajadoras e Inditex tras las huelgas de la pasada primavera: gracias a la movilización de miles de empleadas de tiendas como Zara o Pull&Bear, Inditex accedió a estandarizar las condiciones de las trabajadoras en toda España. Pronto, otras empresas como HyM y Primark terminaron por firmar acuerdos similares.

Tal y como ha explicado en el programa Marcos Gutiérrez, hay más de 220 convenios diferentes en el sector de las trabajadoras de lo textil, lo que constituye un cierto "caos normativo": dependiendo de la provincia o de la comunidad autónoma, las condiciones de las trabajadoras de las tiendas de ropa pueden cambiar enormemente. Gutiérrez ha querido remarcar, además, que en os primeros meses de este año las empresas textiles han percibido un aumento de los beneficios del 40% con respecto al año pasado, gracias a un incremento de las ganancias de 2.500 millones de euros.

"Son empresas que pueden y deben pagar más a sus trabajadoras", ha declarado el portavoz del sindicato. Tal y como explica Aliaga, el sueldo de las trabajadoras en Madrid supera por poco los 15.000 euros anuales; esto son poco mas de 1.000 euros brutos al mes por una jornada de 40 horas.

Trabajo antes de abrir la tienda

"Lo que la gente no ve es todo el trabajo que hacemos puertas a dentro", tal y como ha explicado Aliaga. Según ha expuesto la dependienta, además de atender a los clientes, deben atender una gran cantidad ingente de stock, y gestionar también las compras online, que cada vez tienen un mayor volumen. Todo esto supone incluso comenzar con el trabajo 4 horas antes de abrir la tienda, para organizar la ropa en los expositores y gestionar los pedidos.

Todo este trabajo, además, se desarrolla en unas condiciones que Aliaga y otras cientos de miles de trabajadoras quieren mejorar: la parcialidad es casi una norma en el sector, pues la mayor parte de trabajadoras cuenta con jornadas de entre 20 y 24 horas semanales distribuidos en 6 días diferentes, lo que dificulta conciliación. La veterana trabajadora lamenta, además, que en ocasiones se solicite trabajar en días festivos o en domingos sin que se reciba una compensación a cambio, como sí sucede en otros trabajos.