Hace tan solo unas horas que se hizo público el comunicado oficial que anunciaba la "interrupción del matrimonio" de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarín tras 25 años de casados, al igual que sucedió hace 14 años con su hermana la infanta Elena.
Una decisión de lo más común
Sin embargo, lo que suele parecernos muy llamativo en las relaciones matrimoniales reales y mediáticas es algo de lo más común entre las parejas españolas, y cada vez más. Según el INE, solo en 2020 80.015 parejas se separaron, se divorciaron o perdieron la nulidad matrimonial. A pesar de tratarse de la cifra más baja desde que se comenzaran a registrar en 1998, se estima que esto puede deberse al "efecto covid" y que la de 2021 aumente considerablemente.
Hablamos con María Dolores Lozano, presidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia, sobre la publicación de el Informe de Abogados de Familia el cual presenta los motivos por los que los españoles tendemos a divorciarnos.
Los detonantes más recurrentes
Lozano afirma que "generalmente, siempre suele haber un combinado de causas, aunque hay algunas específicas que tienden a ser el detonante". Sin embargo, aunque éstas no sean evidentes, en muchas ocasiones, la aparente normalidad y ausencia de conflicto o discrepancias suele ocultar también muchas de las conductas de pareja que acaban en divorcio.
Entre los motivos que el informe de AEFA destaca como las más comunes se encuentra el desgaste, el alejamiento, la falta de comunicación y el estrés provocado por el cuidado de los hijos. Según Lozano, "aunque suene mal", la crianza de los hijos "es una de lascuestiones que más conflictos y desencuentros provocan en los miembros de la pareja".
Sobre el mito que sitúa al matrimonio como la principal causa de separación, nuestra experta asegura que "en España existen 600.000 parejas que conviven sin estar casadas y que albergan el mismo tipo de problemas, tanto si tienen hijos como si no".
El divorcio según la edad
Este informe sitúa al grupo de edad entre los 40 y los 50 años como el que más divorcios registra, además de por la crianza de los hijos, por los problemas económicos y laborales. Sin embargo, según Lozano, "estamos observando que cada vez existen más divorcios de parejas jóvenes que acaban de contraer matrimonio y que tienen niños muy pequeños".
Otro de los motivos más recurrentes es el "desenamoramiento", que suele llevar al divorcio o la separación a través de una tercera persona que rompe con la normalidad y la comodidad de convivir con una persona de la que ya no se está enamorado. En muchas ocasiones, antes de tomar la decisión final se recurre a un especialista en terapia de pareja "como quema del último cartucho.