Castellví confiesa que Solé le convenció rápidamente para realizar el documental "porque en realidad yo ya iba a volver a trabajar a la Antártida". Además, explica que "hace 170 millones de años, este continente formaba parte de otro más grande situado en una zona tropical" y que "en la zona donde estamos hay una parte en la que sacaremos muestras y encontraremos insectos y plantas tropicales que se han conservado".
Albert Solé confiesa que "sabía la vinculación de Josefina con la Antártida, pero no me imaginaba la dimensión emocional que tenía para ella", razón por la cual, admite, "dí con la razón para el documental".