En su comparecencia en el Debate sobre los Presupuestos del Estado, el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro, ha vuelto a hablar de “herencias recibidas” para justificar la situación económica del país. Es por ello que dedicamos el Gabinete, a las herencias recibidas. En la herencia está la gestión de Zapatero pero también, por ejemplo, la de los presidentes autonómicos y las de Blesa y Rato en Bankia. Nos preguntamos con Elisa Beni, Melchor Miralles y Carmen Rigalt, qué fecha de caducidad tiene eso de la herencia recibida y hasta cuándo podemos seguir amparándonos en ella.
Carmen Rigalt: Las cifras van a misa pero el argumento no me parece bien. Todos saben cómo dejó Zapatero el país y el PP es quien lo utiliza. Montoro, en este tipo de debates, da lo mejor de sí mismo, y si no dijera eso, no sería él. Indica mucha pobreza argumental, pero él debe pensar que eso funciona.
Melchor Miralles: El argumento de la herencia recibida me cansa. Se puede apelar unas semanas o meses después, pero no tres años. Montoro ha presentado unos presupuestos que ya no sirven porque la realidad es diferente. La deuda nos cómo y me indigna que cuando hablamos de paro: dan las cifras pero si declaran que van a crear empleo. ¿Desde cuándo un gobierno crea empleo? Los gobiernos diseñan políticas que posibilitan que los empleados crean empleo. Ha sido una comparecencia de poco nivel.
Elisa Beni: Son presupuestos por los que no pueden poner la mano en el fuego: estamos pendientes de las economías de Francia y Alemania, y el gas en ucrania… esa tercera recesión europea tampoco está controlado por el gobierno. Todo lo que se dice en los presupuestos y muy electoralista. Se puede apelar a las herencias infinitamente, ya que siempre se podría apelar a lo que había antes. Es un argumento perdido y es un tema de poder y responsabilidad, y el PP no quiere asumir la responsabilidad. Herencia o no herencia, el PP se supone que venía con las soluciones, pero tres años después de gobernar ya no se puede decir que no es de tu habilidad.