JELO EN VERANO

Lucía, mi pediatra: "Los padres necesitan simplicidad, que les expliquemos las cosas de manera comprensible"

Lucía Galán Bertrand, conocida como Lucía, mi pediatra compagina su pasión, la pediatría, con la escritura y la divulgación. En JELO en Verano conversamos con la autora de libros como 'Lo mejor de nuestras vidas'. Galán nos explicará cómo podemos evitar algunos de los accidentes infantiles más comunes del verano, como las intoxicaciones o las insolaciones.

ondacero.es

| 27.07.2020 17:19

"Los padres necesitan simplicidad, que les expliquemos las cosas de manera comprensible", considera Lucía Galán Bertrand, conocida como Lucía, mi pediatra. "Necesitan saber qué hacer y cuándo deben llevar a sus hijos al hospital". En verano, son común algunos accidentes, como las insolaciones o las intoxicaciones. Las primeras produciéndose, "de vez en cuando", aunque admite, eso sí "que la gente ya es más consciente". "A los niños a veces se les olvida pedir agua", apunta.

"De 12 a 17, mejor a la sombra"

Aunque a los adolescentes es difícil controlarlos, hay que saber darles un toque: "De 12 a 17, mejor a la sombra". Son actividades físicas que hacen en solitario y pueden ser peligrosas. ¿Cómo se debe actuar en caso de un golpe de calor? "Si se ve que alguien está mareado o obnubilado por el sol, lo primero es apartarle del calor, pero por supuesto, hay que llevarlo a un centro de salud", explica Bertrand.

Intoxicaciones alimentarias

"Los productos de limpieza no hay que cambiarlos de botella: hay niños que ven botellas de agua mineral a su alcance, que contienen lejía, y se las llevan a la boca", explica Galán, que considera que "son cosas de cajón" pero que provocan accidentes que se repiten cada verano. "Pasa algo parecido cuando dejamos las pastillas en los cajones, un niño de dos años los abre y ve las pastillas de colores y no duda de llevárselas a la boca", añade como ejemplo. Galán se ha encontrado con niños que incluso "se han bebido el líquido para ahuyentar a los mosquitos".

Otro de los motivos más frecuentes de intoxicación es utilizar una cucharilla para dosificar los fármacos, y no las jeringuillas. "A veces te relajas, te confías", no das bien las dosis, "te confundes". Por eso, recomienda utilizar siempre la jeringuilla.

El exceso de confianza pueden ser peligroso. "La mayoría de accidentes se dan entre niños de 2 a 5 años. Vigilancia estrecha de los niños y fármacos y productos de limpieza siempre fuera de su alcance", recuerda la doctora.

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