Siete detenidos por el asesinato de un camionero en Caudete (Albacete) en 2014
La Guardia Civil ha esclarecido el asalto y asesinato de un camionero que apareció muerto en noviembre de 2014 en una carretera del término municipal de Caudete, al este de la provincia de Albacete, y ha detenido a siete personas en localidades de Valencia y Cuenca.
La Comandancia albacetense ha ofrecido esta mañana una rueda de prensa donde ha explicado los detalles de la investigación del crimen, en la operación bautizada como 'Antares', y ha precisado en un comunicado que cinco de los detenidos están en prisión provisional y los otros en libertad con cargos.
Los siete detenidos, seis hombres hombres y una mujer, tienen entre 36 y 57 años, seis son españoles y uno italiano, y seis han sido arrestados en las poblaciones valencianas de Alberic, Sueca, Montserrat y Favara, y el séptimo en Pozoamargo, Cuenca.
Cuatro de ellos participaron en el asalto y asesinato del camionero, otro lo ideó y los otros dos colaboraron "de distintas formas", según la Guardia Civil. Además, cuentan con numerosos antecedentes policiales por delitos por tráfico de drogas, extorsión, robos con violencia e incluso alguno de ellos secuestro y prostitución.
El crimen ocurrió el 28 de noviembre de 2014, cuando la central del 062 de Guardia Civil recibió una llamada alertando de que en la carretera N-344 había un camión parado y el cuerpo sin vida de un hombre "con signos evidentes de violencia". Al llegar, los agentes comprobaron que la víctima presentaba varios impactos de arma de fuego y numerosas heridas de arma blanca.
La investigación, coordinada por el Juzgado número 2 de Almansa, ha permitido reconstruir los hechos y confirmar que la víctima fue seguida por cuatro de los detenidos ese día, desde el momento en que partió de su empresa en la provincia de Valencia. Los detenidos lo rebasaron, le dieron el alto y efectuaron el asalto, un golpe "minuciosamente planeado por el cabecilla de la banda", que se encargó de reclutar al resto de los miembros y darles diferentes roles: cuatro se encargaron del crimen, otro consiguió un vehículo y una mujer que colaboró con otras acciones.
Se trata de un grupo criminal que adoptaba "fuertes" medidas de seguridad y que para cometer el asalto y asesinato alquilaron un vehículo sin conductor, aunque después sustrajeron un segundo vehículo que apareció calcinado para destruir pruebas. En la operación se han hecho ocho registros en domicilios y parcelas, lo que ha supuesto la incautación de dos revólveres, dos escopetas modificadas con los cañones recortados, una pistola detonadora, una ballesta, un arma de fuego artesanal y diversa munición.
Además, numerosas armas blancas, 27 tarjetas telefónicas y 34 terminales de telefonía móvil. La Guardia Civil ha explicado que los detenidos también se dedicaban a criar y adiestrar perros de raza potencialmente peligrosa