CALOR

Señales en el cuerpo que indican exceso de calor

La similitud entre los síntomas de otras patologías hace que se complique la tarea de identificar qué le está ocurriendo exactamente al cuerpo. Por ello, los expertos recomiendan acudir a un centro médico para conocer el diagnóstico correcto

👉 Tu mascota puede sufrir un golpe de calor: así consigues proteger a tu perro durante el verano

💼 El plan de Trabajo contra el calor: sanciones de hasta 980.000 euros y más vigilancia para cumplir las normas

Aurora Molina

Madrid |

Imagen de recurso de una mujer bebiendo agua
Imagen de recurso de una mujer bebiendo agua | Freepik

Detectar el exceso de calor sin confundirlo con alguna sintomatología grave, como un golpe de calor, puede ser una tarea compleja, sobre todo cuando el clima es cálido y existen algunos síntomas iniciales comunes.

Entre las principales señales que avisan de que el cuerpo está atravesando por un exceso de calor, en función de su intensidad, se encuentran:

  • Sudoración excesiva, sobre todo en fases iniciales, que puede provocar piel seca si empeora.
  • Sensación de calor sofocante y una sed intensa.
  • Dolor de cabeza, fatiga, mareo o debilidad.
  • Calambres musculares, náuseas o vómitos.
  • Aceleración del pulso.
  • Dificultad para respirar.
  • Temperatura corporal elevada, superior a 39 grados.

Sufrir alguno de estos síntomas puede derivar en otros si se trata de un episodio agudo. Estas señales ayudan a identificar si la piel está sufriendo consecuencias a causa del calor extremo:

  • Piel roja o muy enrojecida
  • Temperatura corporal muy alta
  • Piel caliente, enrojecida y seca

Tener alguno de estos síntomas podría significar que la persona está atravesando un golpe de calor. Los expertos recomiendan acudir a profesionales sanitarios lo antes posible, pues podría tratarse de una emergencia médica que, en este caso, requiere atención inmediata.

Diferencias entre agotamiento por calor y golpe de calor

La similitud entre los síntomas hace que se complique la tarea de identificar qué le está ocurriendo exactamente al cuerpo. De forma resumida, la clasificación es la siguiente:

  • Agotamiento: temperatura corporal menor de 40 grados, sudoración abundante, piel fresca, pálida y húmeda; sintomatología común a fatiga, mareos, dolor de cabeza, vómitos, entre otros. Asimismo, el pulso se torna rápido pero débil. El tratamiento indicado es descansar, hidratarse y enfriar el cuerpo.
  • Golpe de calor: temperatura corporal superior a 40 grados, sudoración ausente o mínima: piel roja, caliente y seca; sintomatología común a confusión, alteración del estado mental, pérdida de la consciencia, convulsiones. El pulso es rápido y fuerte. En estos casos se debe acudir urgentemente a un centro médico.