Economía solidaria

El reciclaje textil es la lanzadera del empleo social en España

Cáritas logra trabajo para una de cada cinco personas vulnerables que participan en sus itinerarios sociolaborales. Un dato significativo si tenemos en cuenta que las personas en riesgo de exclusión tienen una tasa de paro siete veces superior al resto de la población activa.

Jorge Infer

Madrid | 26.04.2024 16:49

Cáritas atendió en 2023 a 68.065 personas a través de sus programas de empleo, un 4,7% más que en 2022 y de todas ellas, 13.266 lograron acceder a un puesto de trabajo. Son muchos los proyectos de la economía social, circular y solidaria de Cáritas, pero entre todos ellos destaca uno: el reciclaje textil.

Desde 2018, Moda Re se ha convertido en el mayor operador en la recogida y reciclaje de ropa usada en España y en uno de los principales de todo el sur de Europa. Concretamente, y gracias al reciclaje textil, se crearon más de 1.400 puestos de trabajo, el 55% reservados a puestos de inserción social para personas en situación de vulnerabilidad.

El proceso

Todo comienza cuando los ciudadanos depositamos la ropa que no queremos en los más de 8.000 contenedores ubicados por el territorio nacional. Un gesto que detrás esconde cientos de historias de personas que han encontrado en este proyecto una salida a su situación irregular o de exclusión social y, al mismo tiempo, una forma de contribuir con el medioambiente. Personas que se encargan de recoger el textil para posteriormente trasladarlo a las plantas de Moda RE, por donde cada año pasan 44.000 toneladas de este material; una cifra que representa casi la mitad de toda la ropa que se recoge en España. Tras una estricta clasificación, la ropa que se encuentra en buen estado se reutiliza a través de su venta en las 141 tiendas contempladas para ello. El resto, se recicla.

Gasto anual

Cáritas dedicó el año pasado 136,8 millones de euros a sus iniciativas de economía solidaria (programas de empleo, empresas de inserción, comercio justo). La suma es un 16,4 por ciento superior al año anterior (19,2 millones de euros más). De ese total, 35,3 millones fueron destinados a itinerarios de inserción sociolaboral, que incluyen orientación laboral, intermediación con empresas y formación y, más de 100 millones a Economía Social; que en España representa el 10% del Producto Interior Bruto.