Uno de los seis muertos tras el ataque a tiros en una parada de autobús en Jerusalén era Jacob -o Yaakov- Pinto, el ciudadano español de 25 años natural de Melilla. Estaba estudiando para ser rabino en la yeshivá Derech Emuna -el nombre con el que se conoce a las instituciones educativas judías- y se había casado en junio, hacía tan solo tres meses.
La Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) ha decretado "luto oficial" y ha transmitido "sus condolencias a su familia, a la comunidad israelita de Melilla de la que formaba parte, así como solidaridad a la sociedad israelí que vive marcada por el terrorismo".
Según testimonios recogidos por El Mundo, Yaakov "era un niño ejemplar, muy bueno, gran amigo de sus amigos". Reconocen que han recibido la noticia "con incredulidad" y que la difusión de la foto de Jacob confirmó lo sucedido. "Todos nos conocemos al ser una pequeña comunidad en Melilla. Era alegre y participaba mucho en la sinagoga", relataba un vecino de la ciudad. "Es una pena grandísima", añadía.
Iba de camino a la 'yeshivá' cuando se produjo el atentado
Yaakov vivía en Israel, donde se mudó cuando tenía 18 años porque "quería dedicarse a la vida religiosa", ha confirmado un familiar a El Español. Allí estudiaba en la yeshivá Derech Emuna y había sido profesor de secundaria en la yeshivá Hedvath HaTorá. "Este horror ha ocurrido mientras iba a estudiar" ha indicado el mismo testimonio.
Su padre era venezolano y su madre española. Se había casado hace tres meses, si bien su familia no pudo asistir debido a problemas con los vuelos. "Tenían previsto ir a la boda, pero hubo un problema con el avión", explicaba otro de los testimonios en El Mundo.
Los terroristas cometieron el atentado en plena hora punta
El atentado fue cometido por dos terroristas que abrieron fuego contra uno de los autobuses de la línea 62 en plena hora punta. Un soldado y varios civiles armados los mataron instantes después. En un vídeo grabado desde la cámara de un coche y difundido a través de las redes sociales, se escuchan los disparos.
Además de los seis muertos, otras 20 personas han resultado heridas; siete de ellas se encuentran en estado grave, según el servicio de emergencias israelí MDS. Las autoridades israelíes han confirmado que los atacantes eran ciudadanos palestinos de Cisjordania, se cree que de municipios cercanos a Ramala.
El ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, lamentaba la muerte del español, al mismo tiempo que criticaba las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, contra Israel y le acusaba de "alinearse con Hamás y contra Israel". Por su parte, el líder español, expresaba su "más enérgica condena al atentado" y trasladaba sus condolencias al pueblo israelí. "La violencia no es el camino", concluía.

