Día del padre

Por qué se celebra el 19 de marzo el día del padre en España: este es el origen

El día del padre coincide con el día de San José, una festividad que tiene su origen en la Iglesia Católica. Sin embargo, ¿por qué tiene lugar el 19 de marzo?

📌 Día del padre en 2024: comunidades en las que es festivo

ondacero.es

Madrid | 19.03.2024 10:04

Padre e hija | imagen de archivo
Padre e hija | imagen de archivo | Pexels

El 19 de marzo, San José, se celebra el Día del Padre en España y otros países como Portugal, Bélgica, Italia o Marruecos. La tradición de celebrar el Día del Padre comenzó en Estados Unidos en 1910, aunque allí se celebra el tercer domingo de junio. Pero ¿por qué lo celebramos el 19 de marzo en España?

En la tradición católica coincide con la festividad de San José, padre de Jesús y esposo de la Virgen María. Una conmemoración que fue el Papa Sixto IV quien la introdujo en el "Breviario romano" e Inocencio VIII la elevó a rito doble.

Y empezó a tomar relevancia a partir del 1621. Fue el Papa Pío IX el que lo proclamó Patrono Universal de la Iglesia. Y Juan XXIII lo incluyó dentro del canon de la misa.

El origen del día del padre

El Día del Padre, en España, se lo debemos a una maestra, Manuela Vicente Ferrero, que impartía clases en la escuela del Santo Ángel de la Guarda, en el madrileño barrio de Vallecas.

Allí sus alumnos, como los de la gran mayoría de los colegios de España, preparaban regalos con motivo del Día de la Madre, pero no para los padres. Y tras hablar con dos padres un poco descontentos con esto, Manuela decidió celebrar el Día del Padre en su colegio a partir de 1948.

Manuela Vicente Ferrero también era conocida como Nely, una columnista en revistas y diarios de la época. Y así Manuela utilizó esta plataforma para viralizar su recién creado Día del Padre.

Esta iniciativa tuvo su catalizador a partir de 1953, con los almacenes Galerías Preciados que decidieron promocionar regalos para el Día del Padre. Un éxito que hizo que el dueño contactara con Manuela Vicente.

A cambio la exigencia de la profesora fue que contratara a todas las chicas que se graduaran en el colegio el "Santo Ángel", donde daba clases. Una campaña de marketing a la que al año siguiente se unió El Corte Inglés.