De las catorce comunidades, solo Andalucía mantiene el aviso naranja en Cádiz y Málaga por rachas de viento de hasta 90 kilómetros, por olas o por lluvias que dejarán 30 litros por metro cuadrado en una hora; el resto de provincias andaluzas sigue con aviso amarillo por el temporal. En Castilla y León, una de las comunidades más perjudicadas por las nevadas, persiste la alerta amarilla por nieve (León, Palencia y Zamora), por lluvias y por fuertes rachas de viento.
Galicia tiene aviso amarillo por lluvias (Orense y Pontevedra), por rachas fuertes de viento o por temporal marítimo. Las comunidades de Cantabria, Castilla-LaMancha, Extremadura, País Vasco, Navarra, La Rioja y Asturias tienen activada la alerta amarilla por rachas máximas de viento que alcanzarán los 90 kilómetros por hora, mientras que en Murcia, en la ciudad de Ceuta y en las Islas Baleares hay aviso por fenómenos costeros adversos.
Aragón y Cataluña tienen riesgo de aludes, de deshielos, fuerte viento y nevadas. La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante, fenómenos meteorológicos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.